domingo, 30 de diciembre de 2012

Fin de año (casi sin mensaje)

Llegada la fecha, me dispongo a desearos que en el año nuevo se cumpla lo que vosotros querais, lo que ya habreis deseado varias veces. No me atrevo a otra cosa. No están los tiempos muy fáciles. Este blog inaugurado en septiembre de 2010, no ha tenido hasta ahora un entorno fácil. No parece que 2013 vaya a mejorar ese entorno. Pero en un día como hoy ... estarán permitidas licencias variadas. El surtido de fotos que acompañan no es muy surtido. Son todas del viaje a África de la pasada primavera y la mayoría de Gambia, seguramente la mayoría tomadas el mismo día. Ni siquiera estoy seguro de que sean las mejores pero el tiempo apremia. Y una intención. No olvidemos África. Allí no hay crisis. No saben lo que es. No han llegado a un estado, que al empeorar, se denomine crisis. Están por debajo de la crisis.
 
Un barco español en busca de
un puerto que en aquel momento también se consideraba español. No llegó nunca a ese puerto.
Confines del territorio oficial de Marruecos y el antiguo territorio administrado por España en el 
Sahara Occidental.
Con Fran Pardo, mi guia en ese viaje.


Mauritania. Muy cerca de la frontera de Senegal. La mítica etapa en la que el rally Dakar llegaba al río.







Mi número (talla) de pie es el 42 o 43. No tengo idea exacta de cómo se miden las medusas. Playa de Brufut, Gambia









Muy cerca de la medusa y minutos después. Pesca desembarcada, subasta y compra sobre la marcha. Tampoco se cocina muy lejos








Puesta de sol sobre un brazo del río Gambia en Berefet. Domingo 6 de mayo








Descarga de pesca en la playa de Tanji











Playa de Tanji












Playa de Tanji































De visita en casa de Verónica Hormaechea, en Bijilo
Sunu buga buga (growing up in the Gambia) creciendo en África









Con los twins en su chiringuito de la playa de Brufut. Cosas de África, dos hermanos mellizos que son cuatro.

Feliz Año Nuevo
Feliç Any Nou
Urte Berri On
Happy New Year
Bonne Année 2013
Ein glückliches neues Jahr

viernes, 28 de diciembre de 2012

Mi mensaje de fin de año




Considerando que todos somos iguales, que es uno de los derechos humanos básicos y garantizados, yo también voy a dejar en el espacio digital mi mensaje de fin de año. Que me perdone el jefe del Estado y los presidentes de los gobiernos, el central y los autonómicos, y todos aquellos que creen que su cargo exige lanzar en esta época del año un discurso al resto de ciudadanos. Prefiero que lo sepan en directo. A mi no me hacen falta sus mensajes, como a ellos no les hace falta el mío.

Una ventaja de ser un ciudadano de a pie es que estas líneas solo las leerán unos pocos y fundamentalmente amigos, con lo que difícilmente llegarán a molestar a nadie aunque no todos coincidan con el contenido. Al final, es lo que piensa un amigo. Pero ni el rey, ni el presidente del gobierno Rajoy, ni el presidente Diego son mis amigos. Y prefiero que lo sepan y que sepan que no me han gustado sus discursos, y que mi único consuelo es que cada vez son seguidos por menos ciudadanos. El del rey, en Nochebuena parece que ha alcanzado mínimos históricos de seguimiento.

Puede ser que muchos ciudadanos, mientras acababan de poner la mesa para la cena familiar, tuvieran un recuerdo para elefantes africanos o yernos muy poco modélicos. Lo peor, a mi juicio, una vez que en la mañana de Navidad y al día siguiente, nos fuimos enterando del contenido del mensaje del monarca, es que cada vez más, el rey se enroca. No soy buen jugador de ajedrez. Desconozco si es una buena táctica. No recuerdo si cuando la he empleado me ha ido mejor que cuando no lo he hecho. Pero el rey, como hace un siglo hizo su abuelo, liga su suerte y la de la institución, a la de los dos partidos mayoritarios.

Para uno de ellos, el PSOE, el mero hecho de que cada vez más ciudadanos vayan creyendo que no hay opción diferente, significa el suicidio. Eso y la falta de liderazgo, o la contestación cada vez más abierta a un liderazgo muy débil, precipita a los socialistas al sótano, a la trastienda, a la cada vez mayor invisibilidad. 

Fuera del “turno”, cada vez más se parece la situación a la de hace un siglo y no soy de los que creen que la historia se repite, no parece que hay alternativa sólida. Así, la desesperación ciudadana crece, la situación económica no solo no mejora, no se sabe donde puede estar el suelo del descenso, y los políticos, y sigo creyendo que la inmensa mayoría son honestos, tienen un desprestigio que nos puede abocar a cualquier intento de salida antisistema.

En la festividad de los Santos Inocentes, las noticias más calientes son la lluvia de millones de todos que se emplean para salvar algunas entidades financieras saqueadas por sus directivos y la de dos diputados de la mayoría, que en la Asamblea de Madrid se entretienen jugando con sus ingenios electrónicos mientras se privatizan centros sanitarios que eran de todos. No creo que podamos seguir así mucho más. ¿Y cuál es mi mensaje de fin de año? Tremendo, a mí, que hasta hace no mucho me han acusado de optimismo histórico, me parece que sólo sigo aquí por mi edad. 

España no es un país serio. Cada pocas décadas nos reinventamos. Llevamos los doscientos años de Edad Contemporánea como Penélope. Solamente le pido a 2013 que la próxima reinvención no pase por un baño de sangre como todas las anteriores.

martes, 11 de diciembre de 2012

Horribilis, bis





Acabado el puentazo y con las navidades y el fin de año a la vista, acabo de escuchar que se cumple no sé bien que aniversario de aquella famosa frase de la graciosa majestad de los británicos, haciendo gala de su educación exquisita y empleando el latín como medio de distanciamiento: Su año horrible. El que acaba, al menos a los que no somos ni británicos, ni graciosos, ni majestades, no se puede decir que nos haya ido muy bien. Y siempre es bueno mirar hacia atrás para comprobar que hay gente a la que le va mucho peor. En la comunidad de vecinos y en el municipio. En la región y en el país completo. Para que hablar de continentes donde nunca les ha ido bien. O a nosotros mismos cuando bebíamos agua y éramos más jóvenes y guapos.

Y como empezamos a no saber hacia donde mirar, lo mejor es distraer al personal. Buena parte de nuestras autoridades y representantes electos, en la celebración del aniversario de la Constitución vigente, -solo 34 añitos, en comparación con los 64 que ha cumplido la declaración universal de los DDHH- al presidente de nuestro Parlamento regional no le quedó mucho más remedio que embestir hacia una parte notable de la población catalana, la que defiende un nuevo marco de relaciones entre su comunidad y el resto. Horas antes el presidente regional ya había embestido a unos profesores que parece que se quejaban de vicio. Un tema del que el señor Diego tiene que saber mucho dada su profesión anterior a la de político profesional.

Creo que he vivido mucho más tiempo que el señor Cagigas en Cataluña, no soy admirador ni de Menéndez Pelayo ni de Aznar, no necesito intimidad para hablar catalán, no me gusta el señuelo de la secesión, urdido por los conservadores catalanes de la noche a la mañana, seguramente para distraer de un par de años de gobierno tan horribles como aquel de la reina graciosa…

Bueno pues el pasado jueves era más sencillo arremeter contra no se sabe muy bien quién, que citar alguno de los problemas de los distintos grupos que, junto a la pared del convento que fue fábrica de tabacos, gritaban sus diversas situaciones. A mi, no me importa reconocerlo, esa parte del discurso me sacó del sopor. Sentado junto al señor Obispo de la diócesis, llevaba –yo- un rato preguntándome la razón por la que no se había terminado ya el acto, una vez presentados los proyectos de innovación empresarial, que se habían elegido como tema central.

Una foto muy real de la actualidad. Ninguna referencia a lo que los ciudadanos más próximos sufren y, tirando de argumentario ppartidista, eso no lo supe hasta que llegué a casa y comprobé la coincidencia entre el discurso de Cagigas y el del Congreso de los Diputados, una contundencia extrema para condenar lo que en definitiva quiere una parte de los ciudadanos de otra comunidad autónoma. 

Del pan y circo hemos pasado al circo de Wert. En Italia no lo tienen mejor. Amenaza con volver el mayor dueño de circos. Mientras tanto todo, lo que se dice todo, se va desmoronando, menos la falta de vergüenza de los dirigentes que siguen diciendo que es el único camino… Lo único que no me explico es esa seguridad para pensar que el tsunami social, que tiene que llegar, les va a pillar con el chaleco salvavidas…

martes, 4 de diciembre de 2012

Ba y Ba




Unos rapidísimos apuntes de tres amigos en mi cuenta de facebook me deciden a escribir esta entrada. Hoy es la celebración de Santa Bárbara y el aniversario de la muerte de mi abuela Balbina. Mi abuela Salomé murió antes de que naciéramos casi todos sus nietos. Todos los años, desde hace 42, ha sido el aniversario de la muerte de mi abuela. Y desde hace muchos siglos se celebra la festividad de quien comparte patronazgo, un tanto dispar, entre mineros y artilleros, que a su vez comparten el tema de los explosivos…

Creo que a mis amigos les ha debido gustar más el apunte histórico. Aquella señora, citada en mi entrada anterior, titulada Comillas, muy alta, bastante delgada, moño recogido en la nuca, vestida siempre entre negro, blanco y grises, no recuerdo una nota de color en sus hábitos, es una estampa de la España en la que nació, vivió y murió. Una España con muy poco color. Y vino a morir el día en que empezó en Burgos el consejo de guerra contra activistas de ETA, varios de ellos detenidos en Mogrovejo, Liébana, en 1969.

El denominado Proceso de Burgos marcó mis primeros meses en Barcelona, donde residía desde octubre de aquel mismo año. Allí me llegó la noticia de la muerte de mi abuela. Pocos días antes habían secuestrado al cónsul de la Alemania Federal en San Sebastián. Las semanas de aquel diciembre pudieron parecer años. La prensa extranjera, que entraba con cuentagotas, se ocupó muy ampliamente del proceso. La conmutación de las penas de muerte, conocida el día de Nochevieja, tuvo lecturas muy diversas.

Un diario tan poco sospechoso como el ABC ofrece en su hemeroteca, a todo el que quiera consultarla, una página completa de las reacciones en Londres, Paris, Bruselas o Méjico, pero también en Guipuzcoa o Navarra. Una cita expresa de Severo Ochoa o del obispo de San Sebastián, que ya se permitió decir que era una noticia que contribuía a pacificar la provincia… y se pacifica, o solo se pacifica, lo que previamente no estaba en ese estado.

En fin, pese a tanto revisionismo interesado, muchas cosas habían cambiado en la sociedad española a la altura del final de 1970. Quedaban cinco años de Dictadura y no sé cuántos de transición. Todavía quedaban penas capitales por aplicar, hasta septiembre de 1975, pero insisto, la conmutación de las penas de muerte a los activistas de ETA, no fue una medida de gracia del general Franco, o no solo fue eso. La presión, interior y exterior, no sé en qué orden, forzó la medida.

Muchos de aquellos condenados a muerte en Burgos han ocupado cargos de representación democrática, y no en las filas del abertzalismo radical, una vez restaurada la democracia, o cátedras universitarias… Parece que estaban bastante lejos del puesto de fieras salvajes que les atribuyó la Dictadura. También algunos de sus abogados defensores estaban muy lejos de las posturas que han alargado la violencia terrorista hasta hace bien poco. A algunos he tenido la fortuna de tratarlos: Gregorio Peces Barba y Josep Solé Barberá, ya fallecidos. Con Pedro Ibarra Güell todavía he comido el sábado pasado …

jueves, 29 de noviembre de 2012

Comillas



No pretendo ser objetivo, quiero ser combativo. El título se relaciona con mi esencia, con mi identidad. Uno de mis primeros recuerdos de niño era el paseo que había que dar desde Comillas hasta la casa de mis abuelos, después de haber ido en tren a Cabezón y en un autobús desde el pueblo de la sal al de los arzobispos. La bajada de la Hayuela, la vista de Oyambre desde Canales, están unidas a mi DNI. Posteriormente la Cantábrica hacía el milagro de recorrer la distancia entre la calle Somorrostro de la capital y mi pueblo en poco más de dos horas. 

Comillas también significaba, para un chaval ya de 10, 12 y 14 años, el lugar al que acompañaba a su abuela para ayudar en las compras y cargar alguna bolsa. La recompensa de la abuela, muy de aquellos tiempos, una mistela y unos emparedaos en la Confitería (la de Angelín). Y tomar prestada la bici de alguna prima, la de corredor de mi primo Emilio estaba muy difícil de conseguir, para ir a La Rabia a buscar lo que se hubiera olvidado. Y las fiestas de El Cristo cuando el baile empezaba a ser una posibilidad de algo más. Y practicar una lengua que se había aprendido en el Colegio, o en el Instituto, con chicas, casi siempre rubias, menos recatadas que las nativas y con nombres que acababan siempre en e, Brigitte, Catherine, Sélène, … 

Y los baños compartidos con los seminaristas y con la nata de los papardos en Oyambre. Sin mezclas. Con zonas acotadas sin que nadie tuviera necesidad de publicarlo. Y muchas alegrías y más llantos. Y por fin, hace unos años, un proyecto de futuro. Un proyecto que, con dinero de todos, primero rescató a los jesuitas la propiedad de una finca que sinceramente no tiene igual en el resto de  la región, o a mi me lo parece, y que empezó a rehabilitar un patrimonio arquitectónico de lo más notable de ese mismo marco regional. 

Ayer he visto la nueva fisonomía de la Fundación. El informativo territorial de la tele pública sitúa a Tatiana Álvarez Careaga en la órbita del consejero de Educación. No se si eso quiere decir que son de la misma secta. Espero que la señora Álvarez Careaga, por su propio prestigio profesional, rompa el maleficio de la profecía anunciada. Desde que empezó todo el proceso se demostró que tenía muchos enemigos. Empezando por el partido que hoy está en el gobierno, por el principal medio de comunicación regional, por algún infiltrado que trabajaba aquí en beneficio de la competencia riojana y que creo que ya está allí… Cuando hay tanto empeño en que algo no salga… es muy fácil advertir a posteriori con nuestro típico “¿Ves? ¡No ha salido!”

Escribo con rabia y no me importa reconocerlo. Después de haber escuchado a alguien con cierto eco decir en un programa de radio que hace poco, un día laborable, no encontró un lugar para cenar en Comillas. Normal. Si se ha decidido, por tener razón en una pugna partidista, estrangular el futuro de una comarca, acabarán por no cenar ni en las casas particulares. Escribo pensando en alguno de los jóvenes emprendedores que se comprometieron con ese plan de futuro de la villa y que hicieron sus inversiones en ella. Allí han nacido niños y niñas, en los tres o cuatro últimos años, que puede que no acaben la Primaria en el colegio local. Al escribir esto, hoy, no se si tengo más rabia o tristeza …

lunes, 26 de noviembre de 2012

Las alforjas/ Les alforges




Tenía yo un problema las últimas semanas. Parecía que era el único, entre millones de ciudadanos preocupados, que no se tomaba en serio que en Cataluña hubiera un enorme problema y que lo de ayer era un adelanto de lo que el calendario maya parece que predice para un día de éstos…

Pues se lo acabo de comunicar a una amiga de las de allí, de las residentes aunque no nacidas en el Principat. Para este viaje no eran necesarias alforjas. El nuevo Parlament tendrá una composición básicamente igual que el anterior en la divisoria soberanismo/unionismo. Ese lenguaje gaélico me ha producido escalofríos pero se escuchaba anoche en las tertulias radiofónicas. Lo que baja CiU es tan igual a lo que sube ERC… Desconozco en profundidad y en cuanto a soberanismo, la diferencia entre los tres escaños de Solidaritat que se han esfumado y los 3 de las CUPs que han aparecido… Si esto fuera un estribillo y ligando con el final de la entrada anterior a este blog, para este viaje no eran necesarias alforjas/ per a aquest viatge no hi calien alforges

Eso no quiere decir que el título de tonto de la noche no esté otorgado y bien otorgado. Si yo tuviera algo que ver con Convergencia, o con la parte de Unió, no hubiera tardado en pedir la cabeza, política, de D. Arturo ni siquiera el ratín que tardó Montserrat Tura en pedir la de toda la dirección socialista. Está bastante claro quien se ha pegado el mayor golpe. Está claro que en otro meridiano, que quiero pensar que le importa a la mayoría de los catalanes tanto como el del soberanismo, en el de las políticas sociales, la única mayoría que le cabe al señor Más (qué difícil no hacer bromas con ese apellido en una noche como la de ayer) es la que le pueda facilitar el PP, o sea, como antes de la disolución del Parlament del pasado septiembre.

Con lo que ha ahorrado el gobierno catalán en farmacias, escuelas, hospitales, geriátricos etc., estaría bien conocer con todo detalle cuantos euros se han ido por los desagües de la inutilidad en estos dos meses y el que falta de parálisis hasta la formación de un nuevo gobierno. Si ese gobierno tiene el auxilio de ERC, en la forma que sea, será tensando la cuerda del soberanismo y recortando los recortes. Si es el PP el que presta el auxilio, no creo que Más tenga oportunidad de volver a bromear en cuestiones territoriales. 

También cabe que sean los socialistas los que en un ataque de responsabilidad, que a veces les ocurre, y antes de hacerse el último harakiri, el definitivo, decidan entrar en el gobierno o apoyar desde el parque (de la Ciutadella) Pues lo que decía la última entrada de hace pocas jornadas. El pavo, aquí gall d’indi, se llama desde anoche Artur.

viernes, 23 de noviembre de 2012

Pavos



Veo que se ha pasado una semana larga y no he encontrado el momento de volver por aquí. Ha habido asuntos que han llevado su tiempo,  pero sobre todo ha habido un rosario de fechas que me recordaban tristezas diversas, desde el cumpleaños de mi padre, hubieran sido 101, aunque el contador se paró en 80, casi 81; al doble significado del 20-N: De la muerte del Generalísimo al triunfo de Mariano, pasando por el remember que la Fundación que lleva su nombre quiere hacer en un local que parece que gestiona como funcionaria la anterior presidenta madrileña. Uf, uf. Liberales de papel de fumar.

Ahora que voy progresando con el alemán, la lengua, no la enfermedad, cualquier día aprendo a decir fundación y pregunto por la fundación Hitler que seguro que tiene sede en las principales ciudades alemanas. El caso es que el 21 se que se cumplen años, 12, del asesinato de Lluch. Me cogió en el hospital recién intervenido de una hernia discal y me dolió tanto como lo otro, pero eso no llevaba operación. O sea que ayer tampoco escribí.

Y hoy,  el aniversario del asesinato  de JFK, el primer presidente católico de aquel país, ha ocultado bastante, o a mi me lo ha parecido, los millones de pavos que habrán caído en estos días, pues el nombre oficial es Thanksgiving, día de acción de gracias, ya saben aquello de la primera cosecha, los fundadores y los indios, … pero quien lo paga es el pavo. Millones de pavos en las mesas esta noche.

He estado en Dallas en más de una ocasión y quiso el azar que una fuera 22 de noviembre, lunes, a tres días del día del pavo. Era 1999. Ya había visitado el museo del magnicidio en julio de aquel año y allí me enteré de la desaparición de la avioneta en la que el hijo del presidente asesinado volaba hacia un fin de semana en un lugar reservado a las élites. Sólo hay que poner en Google el apellido y julio 1999 para enterarse que era el día del Carmen de aquel año, creo que viernes, pero podía ser sábado.

Pero realmente no era de estos pavos de los que yo venía a escribir hoy. El diccionario oficial de nuestra lengua, en su segunda acepción, tras el ave, dice que pavo es un hombre soso o insulso. El femenino coincide en la sosez, pero añade desgarbada a la cualidad de la pava. Sosa y desgarbada. ¿Se merece la exministra de Vivienda María Antonia Trujillo la segunda acepción del diccionario a la voz pava? Y su colega Bono? Y el ministro de parte de las pelas, Montoro? Y nuestro presidente regional que te vende el Racing en cuanto le preguntas la hora? Y …

Mucho pavo y mucha pava y sin tradición de comerlos, al menos no en la misma proporción que al otro lado del océano. El que tenga un amor que lo cuide, María Antonia, y el que tenga una deuda que la pague, que no se hubiera endeudado. Y desde la dirección actual se habla de no se que alma socialista. Estamos condenados al moco (del pavo) En pocos días el pavo hablará catalán. Será  un gall d’indi.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

El sectarismo en los tiempos del photoshop




No sé si incumplo algún pacto al escribir hoy, jornada de protestas diversas en el sur de Europa y en Berlín - empezamos a ir por el buen camino -, pero lo que está claro es que he hecho la comida ayer para no trabajar hoy, que no voy a comprar ni pan, que me desplazaré andando o en bici… Estoy en, y con la huelga.

Y ya he escuchado lo que dicen algunos medios de comunicación, de alguna manera diferente habrá que empezar a denominarlos, sobre lo de hoy, una huelga contra España y tal. Se sigue editando y con su público, un diario que está históricamente demostrado que participó en el golpe de estado de 1936, que dio lugar a la guerra civil, a los cientos de miles de víctimas, a la dictadura más feroz de nuestra Historia… y a un retraso, en términos objetivos y cuantificables, de al menos 20 años. Numerosos indicadores de 1935 no se vuelven a alcanzar hasta 1955. Bien, si el ABC dice que es una huelga contra España yo estoy en mi derecho de afirmar que es una huelga a favor de la mayoría de españoles. Empate a uno.

¿Cómo debemos comportarnos en pleno siglo XXI en torno a la opinión de los demás? ¿Siempre prejuzgando? El triunfo de Obama se llevó por delante una entrada que quería haber hecho ya la semana pasada. Cualquiera que me siga conoce mi escasa afinidad con el conservadurismo en general y con el PP en particular. Habérselo notificado tal cual hace como quince años al actual presidente del parlamento regional, me libró de ser nombrado, contra mi voluntad, como director de mi instituto.

Al actual presidente regional lo conocí, y el no se acordará, lógicamente, cuando el era un jovencísimo concejal en El Astillero y yo jefe de estudios del instituto de esa población, que se iba a abrir y que todavía tenía el edificio en obras. El Ayuntamiento nos prestó un despacho municipal  durante el verano y el único concejal que se interesó por la precariedad del trabajo del equipo directivo, en el proceso de matricula y puesta en marcha, fue él. Es cierto que éramos colegas, pero también lo es que el estaba entonces en la oposición.

No comparto casi nada de lo que dice o hace pero su postura frente al fracking es esperanzadora y habrá que vigilar que la cumpla y no marear perdices diversas. Con su opinión expresada en la radio el lunes 5, sobre varios aspectos relacionados con el Racing, sólo puedo estar de acuerdo, en especial sobre los sueldos de algunas personas que es cierto que han llegado a donde han llegado por haber merodeado por los aledaños del poder popular. 

Reconocer eso en un día de huelga general me ha parecido conveniente. Del alcalde de Santander hoy no hablo. Ya me han acusado de tener síndrome de Estocolmo con su figura por haber participado como voluntario en el intento fallido del Santander 2016. Si me quieren, pienso intentarlo de nuevo con el Mundial de Vela de 2014.  Quienes tengan compromisos partidarios deberían ir sacudiéndose determinados yugos. La reciente destitución de la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Santander es un tremendo ejemplo de autoritarismo muy antiguo aunque se domine el  photoshop.  Quienes no tenemos esos compromisos nos podemos permitir denunciarlo.

martes, 6 de noviembre de 2012

Primer martes




Hoy. Ese precepto que puede sonar a letanía, el primer martes después del primer lunes, en noviembre de año bisiesto, eso es lo que se da hoy y al otro lado del Atlántico, en ese gran país que no deja indiferente a nadie, que levanta enormes adhesiones y mayores rechazos, hoy, ellos eligen presidente, y muchos otros cargos que habitualmente olvidamos, y es una elección que no nos puede dejar indiferentes.

Hace cuatro años, literalmente sonado, al estilo de un peso pesado caído en la lona por un terrible golpe recibido recientemente, asistí a un debate radiofónico. Un amigo periodista me reunió con una entonces concejala socialista del Ayuntamiento de Santander. Parecía que no teníamos muchas diferencias. Nuestra preferencia por Obama estaba clara. Al final quedamos en vernos cuatro años más tarde y ver en que había quedado el primer mandato del primer presidente norteamericano de piel no muy blanca.

Me adelanté, producto más de mi estado de ánimo que de mi sabiduría política o capacidad de profecía en ese terreno, ni en ninguno, me adelanté a relativizar los cambios que podría protagonizar el recientemente elegido presidente. 

La cita no se va a reproducir. La crisis se ha llevado por delante la emisora de radio en la que hablamos. La antigua concejala no sé a que se dedica y mi amigo no da muchas señales de vida. En un par de ocasiones, al menos, he criticado públicamente actuaciones del presidente Obama. La acción, de alguna manera hay que denominarla, que parece que se llevó por delante a Bin Laden, y que mereció el aplauso entusiasta del entonces presidente del gobierno español, me sigue repugnando año y medio más tarde y como entonces repito, ni una lágrima por el elemento y todas por el procedimiento. Que además sea premio Nobel de la Paz sitúa muy bien ese galardón.

Y así todo hay que elegir y si yo fuera ciudadano norteamericano debidamente registrado, acabaría acudiendo a mi colegio electoral y no dudaría al escoger mi papeleta. Con la diferencia horaria, cuando escribo son las cuatro de la madrugada en la costa este. No han abierto todavía los colegios electorales. Si algún amigo de allí lee esto a tiempo que lo sepa. Yo, a pesar de todo, votaría a Obama para que tenga su segundo mandato. 

En los últimos cien años solo tres presidentes no han sido reelegidos. No considero los casos accidentales, Kennedy, Nixon, … en que los vicepresidentes han tenido que concluir los mandatos. Es posible que en los EE.UU los presidentes de un solo mandato sean presidentes menores. Pero los dos últimos que solo han estado cuatro años en la Casa Blanca, Carter y Bush padre, no tienen nada que envidiar a los demás.  Señor Barack, si en la próxima madrugada resulta que el otro se ha llevado el gato al agua … (to be continued)


domingo, 4 de noviembre de 2012

Alberto Pico




La pereza hizo que ayer no publicara una entrada con la fecha, 3 de noviembre, como título. Todos los relacionados con esta ciudad saben su significado, uno de los más tremendos en nuestra historia local. Cientos de muertos por la explosión de un barco, el “Cabo Machichaco”, ocurrida en nuestros muelles hace casi 120 años. Hago las aclaraciones para ayudar a los lectores de fuera de la ciudad y región. Continúa siendo un misterio para mí el hecho de que entren a este blog tantos americanos, del norte y del sur, y bastantes europeos más nórdicos que nosotros.

Pero como al parecer, y una amiga se va a alegrar al leer esto, todo tiene su lado positivo, no haber escrito ayer hace que el protagonismo lo alcance hoy alguien que lo merece mucho más que una siniestra explosión. Alberto Pico ha conseguido algo que muchos persiguen y no consiguen: Tener distintos homenajes en vida. Uno de los mayores privilegios de la mía ha sido pertenecer durante años al mismo claustro de profesores que este hombre. Haber colaborado en el cambio del nombre por el que el Instituto de Bachillerato del Barrio Pesquero lleva desde hace quince años su denominación actual: Alberto Pico.

Lo de hoy, sumamente sencillo, la inauguración de una placa sujeta a una modesta piedra en la entrada de su barrio, ha tenido al menos un valor: que él, con cierto deterioro en su salud, haya podido asistir. La presencia del alcalde y muchos concejales, y muchos otros cargos públicos de diferentes asignaciones políticas contribuye a realzar lo que Alberto significa en esta ciudad: Bonhomía, por encima de ideologías y de clases sociales.

No tenemos mucha costumbre en nuestra sociedad y no están los tiempos para demasiadas concesiones pero yo, hoy, he estado encantado de compartir el acto con gente tan variada. A la inmensa mayoría, por supuesto, no los conozco. Después, antiguos compañeros de trabajo, antiguos alumnos y las personalidades que por sus ocupaciones públicas todo el mundo conoce. De todas las adscripciones políticas. El mismo Alberto hizo un llamamiento  a superar lo que nos diferencia en su breve discurso.

No he podido evitar el recuerdo de mi primera asistencia a esa iglesia. Verano de 1970. Una boda de amigos. De encargo. Eran comunistas y necesitaban vadear reticencias familiares. Desde 1991, incorporado ya a un Instituto sin salón de actos, muchas más, a veces para cantar con el coro del Instituto, otras en días especialmente dolorosos, funerales, de padres de alumnos, de alumnos, el recuerdo de Pablo me ha resultado especialmente doloroso. 

Pero yo he pasado en esa iglesia, el 21 de octubre de 2008, el peor momento de mi vida y lo pasé allí no por ser una iglesia, sólo por ser la iglesia de Alberto. Muchas veces, en broma, le dije en la sala de profesores, mientras fumábamos un ducados –qué tiempos- que era un privilegio trabajar junto a un santo. Se reía. También se reía cuando le decías, como se entere el obispo –de alguna actuación poca ortodoxa desde el punto de vista de la jerarquía- te van a despedir de esa empresa.

Ni me va a tocar a mi mover el proceso de reconocimiento oficial, ni alcanzaré a verlo, pero cada vez estoy más convencido de que no era una broma. Es un santo. Y lo dejo escrito.

lunes, 29 de octubre de 2012

Sandy




Cada vez estoy más convencido de mi rareza. No uso singularidad, que podría pensarse que me adorno. Raro por extraño, con todo el sentido negativo que se quiera cargar. Una vez consultado el diccionario tampoco parece que se cargue mucho. Al final me pasará como al consejero de Educación y ¿Descanso? que creyó necesario, al utilizar el termino “cortarse”, añadir que es un castellano vulgar. 

“No me corto al decirle a los profesores de inglés lo mal que lo hacen” Más o menos textualmente en entrevista radiofónica del viernes 19. Cortarse está recogido en el diccionario de la RAE en el sentido que le daba el consejero. La RAE no añade que sea ningún vulgarismo. Al consejero le pueden cortar, los profesores de inglés o de otras materias, o los padres, o los alumnos o cualquier ciudadano que pase por la calle Vargas, a saber que parte de su anatomía. Las providencias no lo quieran.

No se me ha ido Sandy, ni mi rareza, es que se me ha cruzado mi consejero preferido. Entre lo que hay que Wert y el local del ramo, van a dejar la educación pública como dijo Alfonso Guerra que iba a quedar España. Profético el sevillano.

El caso es que subo la persiana el último lunes de octubre, hay la luz que debería haber habido todo el mes, si no fuera por la manera en que hacemos lo que hacemos, y con el retroceso horario veo la nieve en la Cordillera antes de mediodía y ni eso me motiva. Quiero ver imágenes. Oigo en la radio que no abre la bolsa de Wall Street y no es por celebrar los aniversarios de las jornadas negras de 1929. 

Tengo amigos que viven en la zona de impacto de Sandy y estoy intranquilo. No es la primera vez que les llega un huracán. También tengo amigos y parientes en Florida pero allí al inscribirte en el Registro Civil del Condado, por nacimiento u otras causas, ya te dan el manual de manejar el asunto, las vías de escape y el equipo que en ninguna casa puede faltar -este último no te lo dan pero te aconsejan que lo compres.

Nueva Inglaterra es otra cosa. Son como más de aquí, les puede coger despistados. Una vez que he vuelto al telediario de la 1, hacía semanas que lo había abandonado, ya he visto que hay quien se hace fotos en las playas, más o menos cerca de Sandy Hook, el cierre sur de la bahía de Nueva York. Sandy y Sandy. Demasiada arena. La primera referencia del Hook la tuve en la contraportada de mi Geografía Física, coloquialmente el Strahler, que debe hacer ya cuarenta años que me entusiasmó y que he consultado cientos de veces después. 

A partir del verano de 1988, durante mi primera visita a Nueva York, también supe que aquella zona que se podía ver desde el Verrazano o Coney Island si la bruma lo permitía, contaba con magníficas playas. En alguna de ellas la tolerancia parecía europea. Espero que el Sandy, huracán, no destroce el frágil equilibrio de Sandy Hook y ya, puestos a esperar, que los irresponsables que van a por la foto de su vida no resulten dañados. El huracán, que no parecía gran cosa hace 15 días, lleva más de 60 víctimas entre sus isobaras.

miércoles, 17 de octubre de 2012

La mala educación




Del mismo título es una película de Almodóvar que no figura entre mis preferidas. Cada vez más ciudadanos españoles piensan que el actual ministro del ramo puede cambiar en cualquier momento el nombre a su ministerio. De lo que ya ha dado pruebas reiteradas es que pese a haber asistido, eso dice su curriculum, a uno de los colegios en el que se educaron las élites de su generación, que es la mía, no se le pegó mucho. Da pruebas diarias de mala educación.

Eso no es lo peor. En una línea intermedia entre pijo de toda la vida – ¿por parte del apellido paterno? y neopijo, (ver entrada anterior)  está mostrando un rencor fuera de lo habitual hacia la escuela pública, la que sigue educando a la mayoría de la población, la que con condiciones mucho menos favorables, sin hacer ninguna selección previa, atendiendo a los alumnos con mayores dificultades de todo tipo, no ha conseguido en ningún estudio figurar con peores registros que la otra, la concertada mayoritariamente religiosa o la privada, por otro lado casi inexistente.

No es fácil consolidar cambios educativos que puedan mejorar los deplorables índices de nuestro sistema educativo, del conjunto. No hay ningún dato, y es necesario insistir, que demuestre que en los colegios que intentan “salvarse de la quema” –privados o concertados- obtienen mejores resultados que en los públicos. Muy recientemente hemos obtenido otra medalla de oro negativa en abandono escolar.

En los años 50, hasta mitad de los 60 al menos, muchas familias modestas, que desconfiaban de la escuela pública franquista, haciendo auténticos malabares financieros, enviaron a sus hijos a la escuela privada. El ministro Wert, si no es relevado de inmediato, por mal educado y provocador, puede conseguir lo mismo en poco tiempo, que la mayoría de familias, en el siglo XXI, entreguen sus hijos a la escuela concertada, mayoritariamente católica, por desconfiar de una pública que  está arrasando a diario desde hace meses.

El ministro, con muy poco sentido del ridículo, ha lanzado uno de los instrumentos asociativos más fuertes de una sociedad muy poco articulada, las asociaciones de padres y madres de alumnos de la escuela pública, a la izquierda radical y seguramente extraparlamentaria. Y ha venido en su socorro un portavoz parlamentario del gobierno que también está haciendo méritos para convertirse en ministro kamikaze o ministro cóctel molotov. El antiguo alcalde de Vitoria, que parece que fue alumno de la pública, ha ido si cabe un paso más allá al asociar las AMPAS a Batasuna.

No están locos, saben lo que quieren. Son mal educados y quieren mala educación para la mayoría. Rebañan pasta para sus colegios protegidos y dejan a los de la mayoría en la penuria… Son realmente muy radicales, extremistas. Muy peligrosos. Hay que tomárselos en serio. Lo mejor es estar en estos días con los padres de la pública. Al menos, en tiempos tan confusos, saben lo que no quieren.

domingo, 7 de octubre de 2012

Neopijos



Sin aspirar a ningún premio nacional de pensamiento o lenguaje, no me cuesta reconocer que creo con firmeza en que hubo un tiempo anterior en el que los significados de las cosas tenían mayor correlación que en la actualidad. Ya he hecho alguna referencia a la perversión del lenguaje en entradas anteriores, no quiero insistir, pero una vez que se anula el lenguaje nos parecemos mucho más al resto del mundo animal.

Con independencia de tener un puesto de juez estrella en la Audiencia Nacional o en el Congreso de los Diputados, o un cargo perfectamente prescindible en tiempos de crisis, como el del baboso, perdónenme, que ha intentado hacer una gracia –con ninguna gracia- de otro tiempo, en relación con la violación de las leyes, lo cual no ha tenido mucho eco, parece que todos violamos leyes a diario. Le ha costado el puesto el ejemplo, que era nada menos que la violación de mujeres. Hace falta ser … También es cierto que Amaya Montero, ex-oreja de Van Gogh, había dejado horas antes un twitter muy confuso sobre que quieren decir las mujeres cuando dicen no ... Al menos Amaya Montero parece que dice algo más que no (¿?)

La demostración de que tenemos una justicia muy precaria es que todavía hay un diputado del PP por la calle y en su cargo, después de haber insultado a un juez. Pervirtiendo el lenguaje. Que ya debería estar penado en algún código aunque fuera el mercantil. En origen pijo y ácrata eran términos todo lo antitéticos que pueden ser dos términos. Que un alto cargo del partido en el gobierno se los endose juntitos a un alto magistrado revela muchas cosas a la vez.

Tengo que aclarar que el neologismo del titular no es exactamente propio. Aproximadamente la mitad de los derechos los tiene uno de mis cuñados con el que la vida me ha hecho disfrutar muchas buenas horas. Creo que los dos entendíamos por neopijo algo que en un tiempo se denominaba desclasado. Después ya empezamos entre todos a modular –influencia de la delegada del gobierno en la comunidad madrileña, que hay que ver como modula- el lenguaje. Los términos de clase parecían pasados de moda. Quienes habíamos aprendido marxismo, académico y aplicado, nos dedicábamos principalmente a cosas aparentemente más divertidas y…

Los pijos de toda la vida, gente de fundamento en su mayoría, se vieron desbordados por oleadas de neopijos que se les subían a las jorobas a la par que los cuellos de sus camisas de polo con dibujos de la marca cada vez mayores. Daba igual el contexto. Cualquier ocasión era buena. Una foto con un líder, sindical, político, económico, deportivo… podía valer un genuino Potosí. En muy buena parte por estar el casillero de neopijos lleno de personal que tenía, y tiene, sueldos y prebendas cercanos a los que se creía que tenía alguna reina mítica.

Y después estaba el arte de la conversa. Quién, por ejemplo en esta ciudad y región, no es amigo íntimo, del colegio, de todos los empresarios conocidos o diputados y senadores… de tal manera que si solo sigues siendo amigo de tus amigos, no vales prácticamente nada. No deberíamos olvidar que una acepción de pijo es algo sin importancia. Algo que te importa un pijo.

Pues como últimamente he padecido algún ataque de budismo o algo parecido, ya le voy encontrando un sentido positivo a toda la marejada que estamos viviendo. A ver si al final, con la crisis, los mecánicos parados y las dependientas en las listas del INEM, con todo respeto para mecánicos y dependientas, dejan de fabular que son amigos de Emilio Botín, del alcalde o del presidente regional. Es como volver a llamar a las cosas por su nombre. Volver al lenguaje es volver a la civilización. Y a la lucha de clases, que nos hemos dormido y mira la que nos han liado.


lunes, 1 de octubre de 2012

Out of order




Siempre me gustó, por su traducción literal, el aviso de lo que no funciona adecuadamente en los países de habla inglesa. Si nos da por empezar aquí, menudo temazo. En muy pocas horas he recogido varios ejemplos de cosas fuera de orden. Voy a ir de menor a mayor y puede que no todos los que lo lean estén de acuerdo.

Iberia, líneas aéreas, me manda casi a diario sus ofertas de vuelos baratos a mi dirección de correo. Una llamativa para volar a EE.UU me ha hecho consultarla pese a que hace 12 años que no voy y no tenía pensado ir, pero… Del precio del Madrid-Nueva York se pasa a la letra pequeña. Al precio medianamente bueno del Bilbao-Madrid-Nueva York hay que añadir 130 euros para volar desde Santander. Pongan ustedes los signos de interrogación que quieran. Habrá una explicación, pero a mi no me va a valer. Out of order 1

Hablando de aviones. Hace casi dos años puse una denuncia en el juzgado de guardia, a la sazón el de instrucción número 2, para unirla a todas las miles que se estaban interponiendo en toda España contra la última algarada de los controladores aéreos, que desató un estado de alarma nacional y pérdidas millonarias a las compañías. He pasado por las Salesas extrañado de no saber nada del asunto. Un par de funcionarios, cordiales y eficaces ambos, me han informado debidamente. Lo que me ocurrió no se considera probado como delito y queda provisionalmente sobreseído, puedo interponer recurso por otra vía distinta a la penal. Un año trascurrido desde que el juez y los demás funcionarios hicieron su trabajo. No me lo comunican por no haberme personado con abogado o procurador. Parece el menor de los trabajos, el de comunicar al interesado pero así están pinados los bolos. Out of order 2

El Instituto Nacional de Estadística, INE, me ha seleccionado para una encuesta. Los recortes han debido afectarles. Ya no viene un entrevistador a casa. Puedo contestar a través de Internet. Me facilitan las claves. No funciona. He llamado dos veces por teléfono a una línea gratuita, 900. Las dos veces me he encontrado con un contestador que me indica a que horas debo llamar. Es el intervalo en el que estoy llamando. Puede que lo vuelva a intentar. La estadística me parece importante

El próximo lunes el Ateneo de Santander tiene programada una conferencia con un título incalificable. “La Guerra Civil, un acierto” A cargo de Antonio Calvo Rubio, presidente de ASDUA, una asociación con alguna relación con la Guardia Civil. El terrorismo hace tiempo que se reveló como un poliedro de muchas caras. Ese titular me parece terrorismo en estado puro. Es el último no funciona de hoy. 

Me entero del programa del Ateneo el día de la muerte de Eric Hobsbawm. Es cierto que tenía una edad varios años por encima de la esperanza estadística. Amaba nuestro país y hablaba nuestra lengua aunque su obra no se dirigió como la de tantos de sus colegas británicos a nuestra historia nacional. El siglo XX está dejándonos definitivamente pero algunos no se han enterado.

lunes, 24 de septiembre de 2012

La Merced




Además del noble afán de redimir cautivos hoy es la festa major en Barcelona, una ciudad en la que, al margen de la mía natal, es donde más jornadas he vivido y trabajado y noches he dormido y festejado, y donde nació mi único hijo. Y ahora mismo, mientras escribo, el centro de esa ciudad estará invadido por los gegants y, no puedo evitarlo, ni quiero, no deja de hacerme alguna gracia, por partes recónditas de los cuerpos humanos, que en el futuro un vuelo entre mi ciudad natal y Barcelona pueda ser considerado no solo internacional, además, fuera del espacio Schengen. 

Pero la semana viene cargadita. Mañana hay una concentración en Madrid que quiero ver como llamada de atención a los políticos, de todos los partidos, para que empiecen a entender el mensaje que la ciudadanía viene lanzando desde hace al menos dos años. Algunos pueden parecer más sordos que los que no quieren oír y ya se está viendo la víspera. En un par de párrafos señalaré algún acontecimiento local relacionado.

Pero el jueves 27, y llevo 37 años recordándolo y la tristeza me sigue llenando como entonces, se cumplirá el aniversario de las últimas ejecuciones efectuadas en España. Que fueran las últimas y que hayan pasado ya 37 años puede considerarse positivo si se contempla en detalle nuestra historia. Al margen del repudio a la pena capital, quiero entender que mayoritario en nuestra sociedad, los procesos sumarísimos que llevaron a las cinco ejecuciones del 27 de septiembre de 1975, no contaron con la menor garantía procesal. Viví de cerca en Barcelona la ejecución de Juan Paredes Manot, Txiki, y en estas fechas, todos los años desde entonces, lo recuerdo. 

Hace dos, años, quiso el azar que estrenara blog personal (6565 entradas ahora mismo) justo en esa fecha. A 48 horas de una huelga general que empezaba a mostrar el hartazgo de la población frente al tratamiento que se le daba a la crisis económica. Dos años más tarde ya se ha producido otra huelga general, en marzo pasado, pero la desesperanza gana terreno. La sensación de no saber hacia donde se navega es tremenda. La desconfianza en los mandos del buque aumenta. No será fácil evitar la catástrofe y merecería la pena intentarlo

Hace dos párrafos anunciaba éste. Se está empezando a generar un gran movimiento de repulsa en la región a una técnica de búsqueda y extracción de gas, el denominado fracking, fragmentación de la roca para liberar el gas contenido en su interior, mediante procedimientos tremendamente agresivos para el medio ambiente. Ya está prohibido en Francia y en varios estados de los Estados Unidos. Aquí alguien ha vendido ese procedimiento como un bálsamo para todos nuestros males. Y muchos políticos han picado.

Y aquí si que hay transversalidad absoluta. No se salva ni Dios como en algún poema aparentemente poco respetuoso. El gobierno anterior y el actual, de España y de Cantabria, están pringados en el asunto. Y el gobierno vasco del lendakari López y el de Castilla y León… y es por la base, por los ayuntamientos, por donde se empieza a ver una conexión entre ciudadanía y políticos.

No quiero guardarme un hecho. Hace meses, años, se despertó en Cantabria una gran movilización social contra la energía eólica por su impacto visual, básicamente. El presidente, entonces, de una asociación conservacionista a la que yo había pagado cuotas durante muchos años, se distinguió en las críticas al plan energético en nombre de su asociación y sin contar para nada con los asociados. Todavía espero el posicionamiento de esa asociación, en la que causé baja entonces, frente al fracking. No sé quien la preside ahora. El de entonces fue recompensado en mayo pasado con un puestazo muy bien pagado. 

Esa manera de hacer las cosas es la que tiene que acabar si queremos, alguna vez, salir del agujero. O los trasvases entre política activa y judicatura, en ida y vuelta, o, muy actual en Cantabria, entre gobierno y cúpula empresarial. Si hay empresarios cántabros que no voten al PP, y alguno hay, ¿cómo se le queda el cuerpo con el último fichaje de CEOE? Y eso no tiene nada que ver con la capacidad individual, que en el último caso citado está bien probada. Tengo muchas más dudas en el anterior.


lunes, 17 de septiembre de 2012

Juan sin tierra




La semana pasada olvidé mi conmemoración particular del 11 de septiembre. Durante mucho tiempo, exactamente desde que volví a Barcelona finalizado mi servicio militar –era 1973- las protestas que ese año se habían organizado en los alrededores de las Ramblas, por parte de una Assemblea de Catalunya que empezaba a ser apoyada cívicamente, no sólo por los grupos antifranquistas más duros y conspicuos, alcanzaba ya a sectores que nunca se habían manifestado públicamente contra la dictadura, pues ese año, debido a la diferencia horaria y a que yo tenía una jornada de trabajo continua que me permitía acudir a la Universidad por la tarde, no me enteré hasta el atardecer de lo que estaba ocurriendo en Chile en aquel mismo momento.

Todos esos años, al menos hasta 2001, el 11 de septiembre chileno ocupaba un lugar primordial en mi agenda de recuerdos del día. Incluso los tres o cuatro años en que viví a escasos metros del monumento a Rafael de Casanovas. Eso no impidió que estuviera en Sant Boi en 1976 y en el paseo de Gracia en 1977 y en muchas otras ocasiones hasta 1986 en que regresé a mi tierra natal. En 1977, con dos trozos de tela, blanco y rojo, cosidos en horizontal, y pidiendo a la vez la autonomía para Cantabria. El pasado martes publiqué en la única red social en la que tengo alguna actividad que, de haber seguido residiendo en Barcelona, me hubiera ido a la playa y no a la manifestación.

Con todo respeto, la reclamación de independencia me parece una huida hacia adelante por parte de lo que hasta ahora se conocía en Cataluña como nacionalismo moderado. Creo que entre los cientos de miles, quizá millones, que durante decenios reclamamos la más amplia autonomía para el viejo Principado, sería difícil encontrar una mayoría independentista. Es un fenómeno mucho más nuevo que seguramente tiene mucha relación con la crisis y con las maneras de gobernarla desde Madrid         (aunque no se hace de manera muy distinta desde Barcelona) y con la actividad reciente de los separadores, tradicionalmente más fuertes que los separatistas.

Y ahí hemos llegado. Ahora que el último estudio sociológico pone cifras a lo que se venía respirando desde hace meses –los ciudadanos cada vez soportan peor a sus políticos- por un lado, Esperanza Aguirre dimite – sólo deseo que no sea la enfermedad que ha padecido la componente principal de su decisión- y por otro, el nacionalismo catalán intenta desbordar al vasco. Bonito panorama para las próximas semanas, como si no tuviéramos ya bastante con todo lo demás.

Con casi una semana de retraso, y sin coincidir en nada desde el punto de vista autobiográfico, recuerdo a Víctor Jara “(…) Mi padre fue peón de hacienda y yo un revolucionario, mis hijos pusieron tiendas y mi nieto es funcionario (…)” En otro sentido, distinto al de Juan, me considero sin tierra. No se que va a ser de mi.