lunes, 26 de septiembre de 2016

En negro


Como las tarjetas de Bankia. Como el luto. Este blog llega a su sexto aniversario con el brío mutuo que le ponemos quien escribe y quienes lo leen. Superando una media de 500 visitas mensuales que no es ni poco ni mucho. Depende de la comparación, pero que no podía sospechar en el momento en que, recién jubilado, inicié esta andadura. Gracias a quienes os atrae esta visita.

La semana, y no solo en lo personal, sigue marcada por Siria. Un amigo ha escrito que la carrera por Siria celebrada la semana pasada en Santander ha elevado la decencia de esta ciudad (*). En la misma medida en que he figurado en el núcleo organizador de esa carrera, mi propia decencia, mi humanidad, también han aumentado… pero en Alepo siguen muriendo por centenares, a diario. Las condiciones de vida son infrahumanas, hablamos de millones de personas, y el acceso a un poco de agua potable se ha convertido en una aventura para cientos de miles. Aventura que frecuentemente no acaba bien.

A miles de kilómetros, en la calle 42 de Nueva York, los organismos internacionales discuten, en sesiones ordinarias y extraordinarias y como en los mejores tiempos de la guerra fría, Rusia y Estados Unidos se echan las culpas mutuamente y no acaba de salir una resolución clara que alivie el conflicto para la población civil. No hablo de un arreglo medianamente definitivo del conflicto. Solo que la ayuda humanitaria llegue sin convertir en héroes a quienes la mueven y la reciben. Sin que esos convoyes, como ha ocurrido esta semana, se conviertan en objetivos militares.

El Mediterráneo es una plaza mayor. Todos los que vivimos en sus orillas somos vecinos. Siempre lo he visto así. No me influye un reciente video de Serrat. Quién sabe si la canción del pirata de Espronceda "Con cien cañones por banda..." o mis estudios de geografía en Barcelona. Pero se entiende muy bien con un mapa convencional en las paredes de las aulas. Después vienen las manías de los adultos. Las religiones diferentes, los intereses económicos y geoestratégicos y…la liamos muy parda. Pero, la carrera aquí la semana pasada lo certifica, algo cambia cuando la sociedad civil se implica directamente

En este momento la situación política española ayuda mucho. La mayoría solo espera de sus dirigentes políticos que dejen de marearnos. Han cambiado muchas cosas que nadie parece haber entendido y en ese momento confuso gana quien menos miedo da. Lo que hay gana, aunque sea de manera insuficiente, frente al cambio  y mucho más cuando el cambio aparece dividido y vuelto a dividir. Recuerdo una formulación del PSOE como casa común de la izquierda. Debe hacer ya un cuarto de siglo, recién caído el muro… Ya no hay casa, ni común, ni… y los relevos vienen ya fragmentados de serie. Al litigio Susana-Pedro  le acompaña ahora, de forma cada vez más abierta, el de Pablo-Íñigo. Yo no las veo pero creo que hay series mucho más interesantes.

Escuchar los resultados electorales de ayer en Galicia y Euskadi junto a la noticia de la apertura del juicio de los salteadores de la antigua Caja Madrid produce impresiones difíciles de escribir. Al fin y al cabo las leyes autoritarias que el actual gobierno en funciones aprobó con su última mayoría absoluta siguen en vigor.

El único alivio: los cambios en mi vida personal de los últimos meses. Las últimas horas de la campaña electoral las pasé cuidando a mi nieta y ayer, en lugar de estar pegado a la radio al cierre de los colegios electorales, estaba en el cine. Y además acompañado. Fundido a negro...

(*)http://www.eldiario.es/norte/cantabria/primerapagina/calle-manual-ciudadania_6_561053898.html




lunes, 19 de septiembre de 2016

El daño está hecho

Recibo un enlace de un amigo para poder ver un video realizado en las islas Baleares. Se titula así, el daño está hecho y no voy a extenderme mucho sobre su contenido. No me prodigo mucho en este blog con enlaces externos pero ahí queda el citado. Vale la pena mencionar que está hecho por profesionales de la sanidad de las islas. Por profesionales que saben de lo que hablan. Que han visto los resultados de determinadas políticas en su trabajo cotidiano y en la salud de la gente.

Vale la pena recordar que todo ese daño se hizo, supuestamente, para ahorrar y por imperativo de la Unión Europea. A la vez continuaba el atraco a los ciudadanos. Un atraco que con nombre diferente empieza a sustanciarse en instancias judiciales diversas. Con la lentitud propia de la justicia española. Con la maldad intrínseca a su politización.

La perplejidad ciudadana, que parecía que ya había alcanzado cualquier cota posible, sigue escalando, ahora ya sin suelo a la vista. Literalmente agarrados a la brocha por falta de escalera. La deslenguada diputada por Málaga, Celia Villalobos no duda un segundo en achacar los problemas judiciales de Rita Barberá a las conexiones políticas de Cándido Pumpido.

Como la cara y la cruz de una moneda similar, la diputada por Cantabria, Puerto Gallego ve en los suyos, sus problemas con la justicia, el resultado de una persecución política. Griñán, Camps, … pesos pesados de los dos partidos que han gobernado hasta ahora, rellenan a diario las crónicas judiciales. Además la ciudadanía debe soportar en horarios de máxima audiencia explicaciones modelo Cospedal, que en cualquier otro lugar del mundo civilizado y en parte del otro llevarían directamente a la jubilación de la protagonista. A una oficina sin contacto con el público como mínimo.

En documentación pública siguen apareciendo con demasiada frecuencia subvenciones, más o menos encubiertas, en las que el dinero público, incluso en estos momentos de apuro, alcanza a empresas amigas por valor un euro por debajo del límite que obligaría a que la citada subvención fuera más transparente. O transparente a secas. A veces se olvida que eso está muy cerca de …

Y no me voy a privar. Al fin y al cabo este es mi blog. Hay algo parecido a un alto el fuego en Siria. Ojalá –hermosa palabra de procedencia árabe- dure y sea el inicio de algo que se pueda empezar a llamar paz. Hace unos días he recordado en una emisora de radio, a la que acudí para promocionar una carrera celebrada ayer en Santander, que aunque ya no sonara un disparo en Siria, y alguno sigue sonando, tienen por delante años muy duros. En España se necesitaron 20 años. En 1955 se alcanzaron los niveles macroeconómicos que teníamos en 1935.

Hoy y mañana se debate en la ONU sobre esa guerra y sobre el drama de los refugiados en general. Todavía no ha amanecido en Nueva Cork. No cuesta mucho confiar en que por una vez, se haga algo provechoso en una reunión de ese calibre. En mi ciudad, en Santander, la capital de Cantabria, ayer, ha ocurrido algo prodigioso que nos sitúa por una vez por delante de la gran megalópolis de occidente. Ayer Santander corrió por Siria. Miles de ciudadanos se han implicado. Han arrastrado a las instituciones. A muchas empresas. Gracias. Gracias a todas las personas, físicas y jurídicas implicadas.

Se ha vuelto a demostrar que personas trabajando por y para personas pueden alcanzar un nivel de efectividad que muchas empresas e instituciones simplemente ni sueñan. Valor. Ilusión. Decisión. Claves del éxito. Suerte para Siria. Para todos sus ciudadanos. Los que han salido de sus fronteras y, fundamentalmente, quienes han conseguido resistir dentro. El daño está hecho pero pongo mi atención en la calle 42 Este.







lunes, 12 de septiembre de 2016

Cables cruzados



Probablemente hoy en este blog se debería encontrar algo sobre la efeméride de ayer, Catalunya, Chile, Nueva York. 1714, 1973, 2001. El once de septiembre es, al menos, triple. Pero la semana pasada al teleférico que desde Chamonix sube al macizo del Mont Blanc se le cruzaron los cables. Literal. Fue cosa del viento. El rescate se tuvo que interrumpir y unas 30 personas pernoctaron a más de 4.000 metros de altura. Algunas menores. Ahora que Olivia ya ha llegado, sana y fuerte, creo que me interesan más las noticias relacionadas con menores. Nunca habían dejado de interesarme. Ahora me interesan más.

Ese mismo viernes se desató otra tormenta sobre una actividad en la que me encuentro muy implicado y que durante los últimos meses me consta que ha ocupado buena parte del tiempo libre y de descanso de un puñado de personas, sin duda, de buena voluntad. El domingo 18 se va a desarrollar en Santander una carrera solidaria a favor de la población que más está sufriendo el conflicto en Siria: los desplazados internos. Aquellos sirios que no han querido o no han podido abandonar su país, en guerra desde hace ya cinco años. La carrera es una segunda edición de la que se desarrolló en Madrid el pasado mes de febrero y que consiguió poner en el terreno ayuda humanitaria por valor de más de 20.000€ Con escalas tan diferentes, nuestra ciudad puede alcanzar un éxito notable con una cantidad menor.

Los organizadores de la carrera, es justo decirlo, se han encontrado con una colaboración más que notable por parte de todas las personas e instituciones a las que se la han solicitado. Desde artistas como Alejandro Sanz o Amaral a deportistas de élite como Oscar Freire o Laura Nicholls y muchos más. La organización, que no admite ningún patrocinio para que nada ni nadie trate de apropiarse de alguna imagen relacionada con la carrera, publicará un listado exhaustivo de agradecimientos después de terminada la actividad. En ella tiene que figurar el Ayuntamiento de Santander.

Ruth Beitia también se ha prestado a divulgar la carrera. Un hito notable en la historia del deporte español y santanderina de nacimiento. Ha habido alguna arremetida contra esa imagen. Ruth, además de esa carrera deportiva notable, es diputada regional del PP. Y a Antonio Mantecón, concejal de Santander actualmente no adscrito   también se le cruzaron los cables. A alguno de sus colaboradores incluso más. Se supone que conocen perfectamente el valor de los entrecomillados y a pesar de ello simulan que Ruth Beitia ha apoyado SantandercorreporSiria en su calidad de diputada y no por haber ganado, por ejemplo, el oro de su especialidad en los Juegos de Río.

Apenas conozco al concejal y mucho menos a su colaborador. Supongo que son esferas puras. Sin el menor rastro de aristas. Que nunca han protagonizado ningún tipo de polémica. O sea, que estarán ya en los altares de la santidad laica. Nunca vamos a saber cuánto daño han procurado al éxito de la carrera declaraciones como que los organizadores “prefieren pan sin honra a honra sin pan” Invocar a Méndez Núñez desde una izquierda metafísica, cuando además el destino del pan es Siria, solo se puede atribuir a otro cruce de cables.






lunes, 5 de septiembre de 2016

A escote



Aliviado por la no desaparición de Rosa Márquez. Ha tenido más suerte que Fernando Berlín. Pero hoy empiezo por abajo, por local.  El viernes Olga Agüero publicó su columna en el Diario Montañés. La libertad para escribir de la que goza Olga en el Diario, por si misma, aunque hay muchos detalles más, permite comprobar que el Diario está en una etapa diferente a la que durante decenios hizo del decano de nuestra prensa algo que en catalán definirían como carrincló, que no es exactamente mediocre y que me cuesta traducir.

En el siguiente número, el del sábado, el grupo municipal popular de Santander, en cartas al director, como si no tuvieran otro medio de ser escuchados, arremetían contra la periodista. No es la primera vez. Al margen de muchas otras cosas, el efecto altavoz es enorme. La columna de los viernes de Olga tiene muchos partidarios y, supongo, muchos detractores, pero si el equipo de gobierno municipal coloca el amplificador…

Empieza a no existir prensa convencional realmente libre y plural. Leo hoy mismo a Ramón Lobo, un periodista de oficio, muy alejado de tesis bolcheviques, y afirma que La prensa conservadora de Madrid, es decir toda la que se publica en papel… Es como para proclamar el estado de alarma. Por eso es tan importante la columna de Olga. Y la voz de nuevos medios, necesariamente digitales.

Y es que, al final de todo, solo encontramos dinero, sucio la mayor parte de veces. Pero dinero de todos que expolian unos pocos. Se disfrazan de lo que haga falta, siempre envueltos en banderas. Ya sé que hay una distancia entre ir en autobús al Rocío y asegurarse un sueldo de más de seiscientos euracos diarios. Se dice que en el Banco Mundial el ex ministro Soria ganará una cantidad anual que dividida por 365, resulta muy semejante a la pensión mensual de viudedad de una de mis hermanas. Wert no gana ni la mitad en su exilio parisino. Pobrecillo. El año próximo Soria podría llenar el Rocío con más de doscientos autobuses. Eso si que sería una peregrinación…

Peregrino. El diccionario de nuestra máxima autoridad lingüística tiene ocho entradas para esa voz. Alguna le vendrá bien al ministro Soria. No tiene que ser la misma de quienes hayan viajado por la cara al Rocío. Tenemos en asuntos de lengua más de un malentendido. Pagar a escote no es lo mismo que pagar a medias, todos iguales. Si solo tenemos que pagar cada uno la parte que nos corresponde en un gasto común, yo no he ido al Rocío en autobús municipal…

Robin Hood, Dick Turpin, El Tempranillo, Luis Candelas, Serrallonga, tantos otros, tienen el reconocimiento literario. Espero que ninguno de los mandamases del Banco Mundial llegue a nada parecido por mucho que interpreten bastante bien al bandolero postmoderno. También podríamos abaratar el recibo de la luz con el despido de tanto inútil presente en los consejos de administración de las empresas de energía.

En casa seguimos esperando a Olivia y yo lo del sin gobierno me lo tomo a escote. Aposté por un gobierno de primavera, el que era posible entonces. Y tuve algún reproche y además mis dotes proféticas son como son. No hay gobierno de verano y ya veremos lo del otoño como se nos da. Rajoy ha suspendido en septiembre. Puede repetir o abandonar, pero le suena, al fin y al cabo también ha sido ministro de Educación, que lo último no está bien visto.