Los de mi generación venimos de un sistema totalitario, de cantar machismo puro incluso en las excursiones del colegio de curas: el ferrocarril que iba a transportar carbón a Laredo para calentar a las mujeres…y ya aparecía el balón en la canción; en el servicio militar obligatorio: cómo se te escapen las cabras subo y te j…Ojalá se escapen todas p’a que subas y me j… El conejo juguetón de la Loles… Y la mayoría, creo que no entendemos a quienes teniendo casi la mitad de años, educados supuestamente en otros valores, lían la que está liando el camarada Rubiales. Lo que más me ha llamado la atención es que ha comprado el discurso de uno de los escritores que mejor representan esos valores antiguos del machismo/fascismo.
Un señor que veranea en Comillas –o
en sus proximidades-, con pabellones auditivos más exagerados que los míos pero
que no le sirven para enterarse de en qué mundo vive, escribió el lunes 21,
textualmente, solo marco alguna letra: “CampeonEs del mundo, no campeonAs.
El entrenador es un hombre, y el entrenador es fundamental. EnhorabuenAs, campeonEs”. El dislate fue respondido casi inmediatamente por un señor que
no conozco y reconozco que me gustaría: “Ya que es usted tan pulcro con el
lenguaje, hecho que avalan su obra literaria y sus columnas no condenadas,
sabrá que “enhorabuena”, como expresión, es un adverbio y, por tanto,
invariable aunque luego siga un vocativo plural, como por ejemplo:
“Enhorabuena, gilipollas”. Parece que el camarada Rubiales no leyó la respuesta
y ha hecho suya la tesis del escritor fachoso.
Aunque parezca increíble, ganar el
campeonato mundial de fútbol femenino ha sentado muy mal en algunos ambientes.
Ese es, también, el estado de la nación (de naciones). La carcundia, pero no
solo. Periodistas que uno –muy alejado del periodismo deportivo- pensaba que
eran o seguían siendo referentes, escribiendo que lo que ocurre es que a algunas
no las han besado nunca… La española cuando besa y Ojalá se escapen todas. A
pocos milímetros de hacer gracietas con las agresiones sexuales. Nada nuevo:
Relajarse y disfrutar. Sí, venimos de ahí y algunos, muchos, siguen ahí.
Tenemos el foco principal en los
medios de comunicación mundiales y no porque el gobierno en funciones vaya a
seguir en funciones no se sabe cuánto. No. Este es nuestro país. Triunfamos
contra casi todo pronóstico y a partir de ahí y con las patas traseras nos lo
cargamos todo. Podemos incluso dejar la cumbre sudafricana de los BRICS para la
página dos.
El elemento, el firma, el nota, el figura, además del morreo y de agarrarse ostensiblemente sus cataplines, le puso la mano en el hombro a la reina. Es un macarra de libro pero gana seis o siete veces más que el presidente del gobierno y así, que dimita rita. Lo peor de lo peor es todo el tinglado que sostiene a un personaje así con lo que el deporte más popular, aun sabiendo que es un negocio espectacular, se prostituye a diario. Además de algún fuego de artificio, quizá es el momento de meter en vereda, desde los poderes públicos, desde el Legislativo, esa autonomía de las federaciones deportivas que puede avergonzarnos al mismo tiempo que nos procuren triunfos y alegrías.
Menos mal que el rey no pudo ir a
Sidney. Tenía agenda desde la primera hora del lunes y Australia está muy
lejos. A él no se le puede olvidar que el gobierno está en funciones aunque con
el candidato al que ha encargado comprobar si tiene la confianza mayoritaria
del Congreso… Quién sabe que hubiera hecho el camarada Rubiales de paso que
abrazaba al monarca.
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