Final de febrero. Sin virus, hoy sería día de marzas. Las tradiciones.
Y el pasado martes, aniversario redondo del
48 horas después de la función del aniversario de la Tejerada, de nuevo con todos nosotros las aventuras fiscales del anterior jefe del Estado. Ya no debe estar para aventuras de las otras, de las que se dice que ha tenido varios miles. Curiosa manía la de muchos compatriotas, monárquicos y republicanos, de izquierdas y de derechas, de tirotearse el propio pie ¿El primo Orleans también paga los viajes de las infantas? ¿Dónde celebraremos el próximo día del Padre? Entre el Golfo Pérsico y Soto del Real hay mucho mundo.
Javier Cercas, uno de los españoles que más ha
buceado en el
Vox, que es más cosas, también es un partido de gamberreo. El vértigo del acuerdo sobre el consejo de la radiotelevisión pública, les hizo temer más acuerdos y su consiguiente ninguneo. Se han escuchado muchas cosas en la Carrera de San Jerónimo, pero el que-se-besen de esta semana, me parece riguroso estreno. A cada uno lo suyo. Por la otra banda del terreno de juego se supone que corre un partido de lucha y de gobierno. Esa entelequia acabó con el PCE hace lustros. Las cosas se cambian con el BOE, la calle puede apoyar, y si no se sabe, o no se puede, al banquillo, que en política es la fría oposición.
Un Consejo General del Poder Judicial que ese día parecía con las maletas hechas para acabar, de verdad, un mandato que ha terminado hace más de dos años, eso en sí mismo es una tela marinera de calidad, por unanimidad ha informado negativamente sobre un proyecto de ley… Pero no hay que preocuparse. EL CGPJ sigue: Muchas gracias por su enésimo viraje, señor Casado. Vox se precipitó. Queda mucha Liga…
Para acabar, una de local: El Ateneo de Santander mantiene su cruzada particular. Incansable. A la altura de aquella “La guerra civil, un acierto” de hace ya unos años, que resultó un error y querían decir la guardia civil. En qué estarían pensando… Acaba de incluir un acto con un señor más bien serio y feo. Un poco repudiado por su colegio profesional, el de biólogos vascos, y desmentido por la web de Maldita… Manuel Ángel, como pechero de impuestos que acaban en tu señorío, reclamo un dúo con Victoria Abril y Miguel Bosé para antes de que termine todo esto. Seguro que son más guapos, divertidos y puede que no menos científicos. Y otra de internacional: Como los navegadores cuando nos saltamos sus instrucciones, el Washington de Biden dice estar recalibrando su relación con Ryad. Esperemos que en el próximo calibrado todo esté más claro y si el príncipe heredero es un asesino, procuremos que pague por su/s crimen/es.