Probablemente hoy en este blog se debería encontrar algo
sobre la efeméride de ayer, Catalunya, Chile, Nueva York. 1714, 1973, 2001. El
once de septiembre es, al menos, triple. Pero la semana pasada al teleférico
que desde Chamonix sube al macizo del Mont Blanc se le cruzaron los cables.
Literal. Fue cosa del viento. El rescate se tuvo que interrumpir y unas 30
personas pernoctaron a más de 4.000 metros de altura. Algunas menores. Ahora
que Olivia ya ha llegado, sana y
fuerte, creo que me interesan más las noticias relacionadas con menores. Nunca
habían dejado de interesarme. Ahora me interesan más.
Ese mismo viernes se desató otra tormenta sobre una
actividad en la que me encuentro muy implicado y que durante los últimos meses
me consta que ha ocupado buena parte del tiempo libre y de descanso de un
puñado de personas, sin duda, de buena voluntad. El domingo 18 se va a
desarrollar en Santander una carrera solidaria a favor de la población que más
está sufriendo el conflicto en Siria: los desplazados internos. Aquellos sirios
que no han querido o no han podido abandonar su país, en guerra desde hace ya
cinco años. La carrera es una segunda edición de la que se desarrolló en Madrid
el pasado mes de febrero y que consiguió poner en el terreno ayuda humanitaria
por valor de más de 20.000€ Con escalas tan diferentes, nuestra ciudad puede
alcanzar un éxito notable con una cantidad menor.
Los organizadores de la carrera, es justo decirlo, se han
encontrado con una colaboración más que notable por parte de todas las personas
e instituciones a las que se la han solicitado. Desde artistas como Alejandro Sanz o Amaral a deportistas de élite como Oscar Freire o Laura
Nicholls y muchos más. La organización, que no admite ningún patrocinio
para que nada ni nadie trate de apropiarse de alguna imagen relacionada con la
carrera, publicará un listado exhaustivo de agradecimientos después de
terminada la actividad. En ella tiene que figurar el Ayuntamiento de Santander.
Ruth Beitia también se ha prestado a divulgar
la carrera. Un hito notable en la historia del deporte español y santanderina
de nacimiento. Ha habido alguna arremetida contra esa imagen. Ruth, además de
esa carrera deportiva notable, es diputada regional del PP. Y a Antonio Mantecón, concejal de Santander
actualmente no adscrito también se le
cruzaron los cables. A alguno de sus colaboradores incluso más. Se supone que conocen perfectamente el valor de los
entrecomillados y a pesar de ello simulan que Ruth Beitia ha apoyado SantandercorreporSiria
en su calidad de diputada y no por haber ganado, por ejemplo, el oro de su
especialidad en los Juegos de Río.
Apenas conozco al concejal y mucho menos a su colaborador.
Supongo que son esferas puras. Sin el menor rastro de aristas. Que nunca han
protagonizado ningún tipo de polémica. O sea, que estarán ya en los altares de
la santidad laica. Nunca vamos a saber cuánto daño han procurado al éxito de la
carrera declaraciones como que los organizadores “prefieren
pan sin honra a honra sin pan” Invocar a Méndez
Núñez desde una izquierda metafísica, cuando además el destino del pan es
Siria, solo se puede atribuir a otro cruce de cables.
Y, además, una metedura de pata...
ResponderEliminarY, además, una metedura de pata...
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