Otra vez Iberia me ha hecho perder un poco más de una hora
con un retraso, pero no se lo voy a tener en cuenta. El vuelo directo,
totalmente puntual a la ida, compensa el retraso de la vuelta. Las dos veces
anteriores mi visita había sido en agosto. Estos primeros días del verano han
sido mucho más agradables desde el punto de vista de la dureza que a las
visitas turísticas añade, a veces, el rigor del clima.
Amanece bastante fresco y así es también el atardecer. Las
horas centrales son más calurosas pero no faltan brisas oceánicas para
suavizar. El dominio climático de transición, como explicaba Vila Valentí en sus clases de la Universidad de
Barcelona hace más de cuarenta años. La única matrícula de honor, si no recuerdo mal, en mi carrera.
Me toca enterarme en portugués, lengua muy próxima pero que
desconozco totalmente, de hechos notables como el resultado del referéndum en
el Reino Unido o, esto mucho más fácil, la derrota de Croacia a manos de la
selección local. El ambiente festivo de la noche del sábado estuvo muy a punto
de acabar en frío invernal. Lo otro, lo de los británicos, ya se sabe… son muy
raros. Nunca hemos acabado de entender
bien su humor.
Esta jugada es casi perfecta. Nunca estuvieron a gusto con
los continentales. Se equivocaron en el principio y jugaron su propia carta. EFTA. Casi nadie recordará que
leches es eso. Al ver que no funcionaba rectificaron. De Gaulle les puso firmes. Había vivido en Londres y debió de pasar
algún mal rato hasta conseguir que reconocieran el papel de Francia en la
derrota alemana de 1945… A quién le interesa ahora la historia… no empleo la H voluntariamente.
Con una situación de privilegio en la Unión , conseguida por la
debilidad de los políticos continentales de las dos últimas décadas, se
permiten echar un órdago para tratar de que les vaya mejor aún. Y han puesto
muchas cosas patas arriba. Dentro y fuera. Dentro del Reino Unido, por el
resultado del jueves en Escocia y Ulster. Y dentro de la
Unión. Y fuera. A los inversores y
ahorradores de medio mundo la cabriola de Cameron,
me apetece recordar ahora que no es bolchevique, ni tan siquiera
socialdemócrata, es un conservador con, probablemente, un cociente intelectual
por debajo de la media, esa cabriola les ha costado una pasta. El viernes en
España la bolsa perdió uno de cada ocho euros. A ver como se recupera/nos
recuperamos.
Uno que parece que ha ganado algo gracias al miedo es el presidente del
gobierno en funciones. El retraso de ayer de Iberia en el vuelo Lisboa-Santander me impidió estar en
casa con la radio pegada a la oreja a las ocho de la tarde para escuchar los
sondeos a pie de urna e ir calentando motores… por si había algo que celebrar.
Hace muchos años que tengo muy poco que celebrar en ese campo. De hecho, casi
nunca he celebrado nada en ese campo. Pero había algún motivo para pensar que
ahora…pues tampoco!
La corrupción, la elevación a la categoría de mafiosas de
muchas prácticas de gobierno, se absuelven en el templo de la democracia con
las elecciones. Y otra vez… apagué la radio antes de que se terminaran los
programas especiales. Esta mañana, guasapeando
con amigos, he dicho en un grupo que ya no es nuestro tiempo. Que es el de
nuestros hijos y nietos. Que quizá ya no lo entendemos aunque no sea muy
distinto al nuestro y aunque parezca muy simple me he quedado muy tranquilo. Raimon ha acudido en auxilio espiritual: No, jo dic no, diguem no. Nosaltres no som d'eixe món.
Ya en casa me entero de que la izquierda portuguesa también
puede plantear un referéndum sobre la permanencia en la
UE. Si la derecha del norte y la izquierda
del sur se fijan el mismo objetivo…Y a mi me ha dado por soñar que si se abre
institucionalmente y con claridad la
Europa de varias velocidades, los del sur, cinco, ni uno más,
salvo que se entreguen con las manos esposadas: Francia, Italia, España,
Portugal y Grecia, pueden formular la unión política. Ya estoy despierto pero
no voy a alargar esta entrada. Ya seguiré. Esa Europa del sur tiene hoy una
guerra civil. Menos mal que solo es futbolística. Forza Spagna!