sábado, 27 de diciembre de 2025

2025: agotado/s

 

Acaba otro año y es costumbre hacer balance. Lo más general es bien conocido, lo más personal, lo que se pueda divulgar de lo más personal, es el objeto de este balance. Finaliza un año que suma ya una cifra más que notable. No me hago viejo, solo mayor, aunque el espíritu pueda intentar que no lo parezca. El año ha tenido sus dosis de monte y playa, y algo de bici –cada vez menos; vivo en una ciudad poco favorable y no por el territorio; sus gobernantes no han creído nunca en la movilidad sostenible.- Visitas a Pirineos –algún día de esquí [¡¡todavía!!]- y la Cordillera Cantábrica. Fez y Meknés; Roma y Bérgamo y Praga; y la Alcarria y Segovia y Riaza; y el País Vasco y Barcelona y Llanes…han sido destinos del año. Casi todos repetidos excepto Fez, Meknés y Praga: estrenos. La salud aguanta con inicio de achaques: La edad perdona poco y de nada sirve ocultarlo. Y otros frentes que han podido representar preocupaciones muy hondas en algún momento del año, se han solucionado positivamente. Si hablásemos de cocina, la salsa podría ser agridulce.

Un repaso al álbum fotográfico del año lo traduce bastante bien. Olivia y Diego. Fuen. Guillem y el resto de la familia. Amigos de Cantabria, y de Barcelona y de Asturias y la Alcarria y amigos y familia de Cantabria y del País Vasco y Segovia, y, y…

Dos grandes acontecimientos, de los que ya se están ocupando los medios de comunicación, llegan con el año entrante: El Mundial de fútbol, junio-julio, estrena sedes, 16, en tres países: Canadá, Méjico y EE.UU.. Una novedad que se va a ir imponiendo. España, Marruecos y Portugal esperan turno. Y el 12 de agosto llegará un eclipse que también lleva ya mucho tiempo siendo noticia. Lo bueno de este es que no tendré que moverme de casa para apreciarlo. Y también, como otros años, reparo en algún aniversario relevante y redondo del año que empieza. 

En 1776 los Estados Unidos se proclamaron independientes del rey inglés. Ese cuarto de milenio nos asaltará en las vísperas del 4 de julio, con todo lo que eso puede significar en este momento histórico. Esa guerra de independencia también es el inicio del final de la mayor influencia exterior de este país nuestro. El conde de Aranda, embajador en París, ya le advirtió a Carlos III que pudo haber sido una mala operación ayudar a los rebeldes norteamericanos, que podrían ser imitados más al sur. Lo que ocurrió no mucho más tarde. En 1981 un comentario de un controvertido texto sobre ese asunto me ayudó a obtener mi plaza de profesor agregado de bachiller y me permitió abandonar la metalurgia.

Un bicentenario, el de 1826, no creo que tenga mucha celebración. Fernando VII ya había liquidado cualquier veleidad modernizadora y la futura reina Isabel II todavía no había nacido. Un momento particularmente negativo en nuestra Historia, con la fuente que pudo parecer inagotable –el imperio americano- ya extinguida casi totalmente.

1876, quizá tendrá celebraciones pero es otra fecha cenicienta. La Constitución de ese año  legitimó el proceso de la Restauración y supuso un notable paso atrás respecto a la de siete años antes en términos de reconocimiento de libertades y de respeto a una verdadera soberanía nacional. Empezaba el sistema canovista. El triunfo del caciquismo y otra renuncia de nuestras clases dirigentes a sintonizar con el entorno europeo del momento.

En 1926, hace ahora un siglo, la dictadura de Primo de Rivera  intentaba una segunda fase, civil. Pacificado ya el protectorado de Marruecos y con unos años no muy negros para la economía, pudo ser un pobre reflejo –espejismo- de los “felices años veinte”… Que tampoco fueron tan felices en ninguna parte y que aquí no dieron para curar los males importantes que nos aquejaban. Tampoco tuvo suerte el siguiente intento, el de 1931. De hecho, en el año que va a nacer se cumple el noventa aniversario de una enorme desgracia. 

Terminados en 6, desde entonces, el voluminoso NO de la recién nacida ONU al régimen franquista en 1946 y diez años más tarde la admisión -guerra fría mediante- de ese mismo régimen en esa misma organización.  También en 1956 se oficializa la independencia de Marruecos y en 1966 me encuentro mi primer panfleto en la calle, pisado y húmedo, muy cerca del cruce de las recientemente renombradas calles de José Hierro y el Paseo de Altamira, camino del Instituto. Aquel panfleto pedía la abstención en el referéndum sobre la ley orgánica del estado, una operación de blanqueo del franquismo…

Y 1976, Suárez y las demostraciones en las calles de las fuerzas democráticas como un nuevo inicio y 1986, miembros ya de pleno derecho de la futura Unión Europea. Y  1996, final del periodo de González, inicio del de Aznar y esa alternancia en el gobierno asentando el sistema; y 2006 y 2016, Zapatero y Rajoy, con significados tan opuestos… ¿Jugará Sánchez a la lotería del día 6 con un número acabado en 6…? Yo ya lo he hecho.

Salud y Paz/Osasuna eta Bakea/Salut i Pau/Saude e Paz

Feliz Año Nuevo. Urte Berri On. Feliç Any Nou.

Feliz Ano Novo. Bonne Année 2026. Buon Anno 2026.

Ein glückliches neu Jahr. Gott nytt ar. 

Happy New Year. Sana Saida

 

domingo, 21 de diciembre de 2025

El robobo

 


 

Tomo prestado el titular de algo que no fue lo mejor de “martes y 13”. Nos acercamos al final del año y podría ser ya una entrada con sombrerito de cotillón y matasuegras… Pero el patio sigue muy revuelto y parece que en la penúltima semana ha habido muchos robos, quizá hurtos o estafas o simplemente timos o, aunque todavía no lo recojan los códigos jurídicos, una combinación de todos esos incluyendo, probablemente, algo de atraco, aunque no necesariamente a mano armada.  O sí.

Según la presidenta en funciones de Extremadura, por allí parece que han robado la democracia. Está desapareciendo en casi todo el mundo. Lo raro es que aquí empiece por un lugar tan aislado. Sin puertos, sin aeropuertos… ¿de dónde han llegado los ladrones? Otros ladrones están más y mejor identificados. Lo ha denunciado el jueves pasado el escritor Martín Caparrós, enfermo de ELA. Se refiere a la sanidad pública y son muy evidentes los autores del robo en este caso. Lo que ocurre es que lo disfrazan de mayorías parlamentarias obtenidas sin explicitar lo que iban a hacer con el botín. 

En Bruselas parece que se roba a diario. Chanchullos a montones. El robo más curioso, en mi opinión, de los que ocurren en la capital belga no es el temor a una invasión rusa. Ocultar la mayoría parlamentaria y de la Comisión europea permite que el robo/los robos de allí se retuerzan por el camino y aquí, en Cantabria y en el resto de la Península los dirigentes regionales del PP apuntan el robo a Sánchez y su banda. Nada nuevo, salvo la mudez de los que no lo aclaran. Callando ¿otorgan?

Sin ser exactamente un robo, puede que sea otro delito. El final de las vacaciones navideñas contemplará en un juzgado de Catarroja cómo Núñez F explica sus comunicaciones “en tiempo real” de finales de octubre del año pasado con el incomunicado mayor del reino.

Hace 300 años, Rousseau era un adolescente pero Voltaire y Montesquieu ya pasaban de los 30.  Convertir el “Espíritu de las leyes” en una trampa infantil también debería ser delito. Aunque no hay que negar mérito a los delincuentes: No es que estemos olvidando 1945 y el proceso de Nuremberg y la declaración de los DD. HH… el olvido alcanza a 1776 –Trump- y a 1789 y a tantas fechas históricas que nos transportaron hasta aquí. El 4 y el 14 de julio siguen siendo grandes fiestas en los Estados Unidos y en Francia ¿Volverá a ser festivo aquí el 18?

Y en la víspera del sorteo navideño debería imperar el buen rollito a pesar de los muchos, demasiados pesares, de Badalona a Afganistán; de Caracas a Darfur; de Gaza a Kiev… sin olvidar tantos otros lugares en todos los continentes de este planeta.

Gaza, vergüenza de la humanidad; Gaza, siempre en la memoria

 

domingo, 14 de diciembre de 2025

El circo y los enanos

 

Parece que el PSOE y Sánchez están ahora mismo en ese momento. Si deciden poner un circo, les crecen los/las de talla baja, o se les escapan las fieras o se caen los del trapecio sin red. No se lo he escuchado a ninguno de los analistas sesudos, ni a Manuel Vicent, ni al presidente del Ateneo de Madrid, ni a Carlos Boyero, que está saltando del cine a quién sabe dónde,… curiosamente puedo coincidir en parte con el jefe de los obispos, pero una moción de confianza frente a la no moción de censura del cobarde político y empezar 2026 al ataque, me parece la única manera de evitar la disolución de las Cortes.

En la entrada del 30 de noviembre me preguntaba si el Poder Judicial había terminado la Transición. La respuesta es: no. Y si me cabía alguna duda se me despejó ayer escuchando a Carlos Castresana en la radio. El fiscal que consiguió que la Justicia española se ocupara de las dictaduras chilena y argentina antes de la nuestra…

Volviendo un momento al cine, no sé si Bertolucci reflejaba bien la historia de Puyi, el último emperador de China. De lo que estoy bastante seguro es que otro último emperador, Aznar,  y su “quien pueda hacer que haga” no tendrá una eminencia como el italiano ocupándose de lo suyo. Pero de momento, lo bien que se lo debe estar pasando con sus monaguillos canosos.

Y a paseo mi matrícula de honor en latín en aquel lejano tercero de bachiller, materia obligatoria y común. In dubio pro reo, ya no tiene el mismo significado después del afinamiento de la sala segunda en el caso del fiscal general. No voy a entrar en disquisiciones jurídicas, no estoy preparado. Pero en el desempeño de mi profesión aprendí que frente a la responsabilidad civil, de la que podía ocuparse la administración en el caso de condena a un funcionario, la responsabilidad penal es o era ineludible. Si el culpable no es el fiscal pero puede ser alguien de su entorno, desconocido hasta ahora… esa sentencia no va a tener mucho recorrido cuando salte las fronteras…  Claro que muchos puede que no lleguemos a ver ese momento dados los tiempos de la Justicia –española y europea- que se acercan más al tiempo geológico que al histórico.

Por último sobre ese asunto, de quien he visto un comentario demoledor para los cinco jueces sin piedad, sin salirse de su ámbito lingüístico, gramatical, ha sido a Alex Grijelmo en El País. La ciencia de las lenguas, junto a la Geografía, es la ciencia social más próxima a las experimentales, mucho más que el Derecho, o era así al menos hasta ahora.

https://elpais.com/espana/2025-12-11/los-condicionales-y-las-inferencias.html

 

Y por terminar con transiciones y con el asunto que abría esta entrada. Quienes hemos doblado los cabos de tantas décadas desde nuestro nacimiento, transitando un periodo importante de nuestras vidas en una dictadura, con “El Caso” como lectura normalizada y “la maté porque era mía”; educados en escuelas, colegios e institutos segregados por sexo, cantando aberraciones en la excursiones o en el servicio militar obligatorio… y hemos transitado hacia posiciones de respeto e igualdad entre ambos sexos; de respeto, incluso sin entender la totalidad de las cuestiones de género… nos preguntamos qué transición no han hecho los que tienen quince o veinte años menos y además ocupan o han ocupado puestos de poder y responsabilidad en nombre de ideas que en la práctica no comparten. Más daño a la causa, a las causas, que los simples chorizos…

Y una recomendación final. Por la publicidad de una publicación reciente de la misma autora, descubro el primer éxito de Maja Haderlap, “El ángel del olvido”. Simplemente imprescindible. Un rincón, entre tantos, de esa Europa central, frontera de culturas diversas, que se expresan en alemán o en lenguas latinas, o eslavas… En este caso el sur de Austria y la minoría eslovena. La memoria de la guerra, de los que combatieron al nazismo y lo pagaron caro, en el momento y después… A quienes les dieron a elegir, nunca sabrán si acertaron, austriacos o yugoslavos entonces… pero hoy Eslovenia es un estado independiente y miembro de la Unión Europea. Está en e-biblio.

 

Gaza, vergüenza de la humanidad; Gaza, siempre en la memoria

 

domingo, 7 de diciembre de 2025

Majestad, no más


Tener un ex rey fugado puede ser una vergüenza nacional pero que salte a la publicidad de su libro poniendo en duda a los profesionales de la enseñanza de la Historia, me provoca una vergüenza personal. Me siento aludido. Resulta –según él- que los jóvenes no conocen la Historia. Tiene que venir él, un protagonista de la misma –por ello difícilmente objetivo- a contársela en forma de cuento. Sí, majestad, con ‘m’ minúscula, hay Historia, historias y cuentos. Lo suyo pudo haber sido Historia pero ha acabado en cuento, nivel Carracuca, y se lo ha buscado su majestad a pulso.

Hay todo un movimiento de opinadores/as que dan por sentado que los profesores de Historia nos hemos dedicado a no se sabe qué y que no hemos tocado los temas difíciles. Esta semana he escuchado en la radio a una profesora valenciana que reivindicaba que ella no había eludido esos temas. Ya somos dos. En 3º de BUP y después en 4º de ESO y 2º de Bachillerato, muchos más y yo, hemos explicado la II República y la Guerra y el Franquismo y la Transición. Hay temarios de las pruebas de selectividad que no se podían eludir.

Tengo apuntes personales que facilitaba a mis alumnos para ayudar en el manejo de los libros de texto o las lecturas complementarias. Creo que mis antiguos/as alumnos/as lo podrán certificar. He vuelto a consultar el último tema impartido de Historia de España hace  25 años. Después me dediqué más a la Geografía. En el marco de aquella España, entonces gobernada por el PP de Aznar, su majestad el ex rey fugado no quedaba mal, tras los gobiernos del PSOE, la entrada en las Comunidades Europeas, los fastos del 92, el euro a punto de circular… Mis apuntes decían textualmente que habíamos alcanzado “la mayor influencia en el exterior desde Carlos III” o sea, en dos siglos. Y no recuerdo que yo fuera entonces más monárquico que ahora.

Entre el aniversario de la Constitución -ayer- y la patrona de la fiel infantería -mañana-, hoy es el cumpleaños de un amigo. Siempre le he felicitado al grito de “Tora, Tora, Tora” recordando el ataque japonés a Pearl Harbor del que se cumplen 84 años. Esa guerra no sé bien cuánto mal les procura a nuestros dirigentes derechistas, pero menos que la nuestra. No debe ser fácil asumir que la línea del parentesco directo se desenvolvió entre traidores y criminales. El manoseo de la Historia es pornográfico. La misma alcaldesa que se resistía a cambiar el nombre a alguna calle porque era parte de la Historia, se resiste a que se declare un espacio de esta ciudad como ‘Lugar de Memoria’ ¿Qué les ha parecido a Gema Igual, a Buruaga, a Íñigo Fernández la ceremonia de hace unos días en Guernica/Gernika con presencia del rey y del presidente de Alemania? –División del trabajo: hoy mismo está en Israel el canciller Merz bailando el agua al genocida- Si de verdad creen que no le importa a nadie que la Magdalena sea objeto de esa declaración, por qué la lían tan parda.

La Magdalena es y ha sido muchas cosas, al menos desde que se instaló allí la primera batería de defensa de la bocana de la Bahía, hasta el lugar de referencia mundial como sede de los cursos de la Universidad Internacional y la residencia veraniega de la familia de Alfonso XIII durante unos años… y también un campo de concentración. Recordarlo no le debería sentar mal a nadie. Sacar, de nuevo, a relucir a las víctimas del barco-prisión ‘Alfonso Pérez’ sin el contexto del bombardeo nazi previo, es otro manoseo histórico. Las víctimas, todas, todas, merecen respeto. También las que  nunca han recibido homenaje. La foto que acompaña no es de una playa nudista. Es de aquel entorno en donde hubo más víctimas que en el barco-prisión. La foto está depositada en la Biblioteca Nacional y fue publicada por Alberto Santamaría, profesor de la Universidad de Salamanca, ya debe hacer unos diez años… Por favor, una stolperstein para La Magdalena –Buruaga, Igual, buscad el significado de stolperstein y no tropecéis de nuevo con la misma piedra-

 

Gaza, vergüenza de la humanidad; Gaza, siempre en la memoria

  

domingo, 30 de noviembre de 2025

Rien de rien, majestad

 

O rien de tout. Nada de nada; nada en absoluto. Del rey – en este caso emérito- abajo ninguno. Aquí nadie se enmienda, nadie pide perdón, y muy pocos,  permiso. Yo tenía la sensación de que el país, la mayoría de sus habitantes, íbamos por una senda, con sus dificultades y sus alegrías, con los amigos/as y las familias y los compañeros/as de trabajo… y después, por otro carril, la gente que se supone que manda, que nos representa, que nos juzga, que nos multa y que nos hace pasar ratos de los que hacen subir la tensión arterial a los hipotensos. Una nueva etapa de las dos Españas. Ya veremos cómo acaba la partida. Ojalá de alguna manera original, nueva. Las otras las conocemos y son poco apetecibles. Pero al final, disculpen/disculpad el suspense, puedo señalar que empiezo a caerme del guindo. Y que el mal rollo sí que ha traspasado el seto de separación de los carriles mencionados.

Ni rien de rien el presidente Sánchez,-nada de moción de confianza- ni rien de rien Núñez y su no moción de censura, ni rien de rien la presidenta Buruaga –nada de disolver el Parlamento por lo mismo que exigen a Sánchez-. Al gobierno regional y sus presupuestos rechazados por la mayoría que tiene el conjunto de la oposición, se le puede pasar la prueba de la traducción directa: Si la oposición en Cantabria hace daño a la región al no aprobar los presupuestos del PP ¿No vale lo mismo cuando el PP no aprueba los presupuestos del gobierno de España? El consejero de Economía, Agüeros, trata de explicar las cosas desde un nivel de conocimiento técnico notable. Después están los “hooligans”, Media, Silva, el senador Fernández… no tienen nada que explicar porque para empezar no suelen saber de qué hablan. La culpa siempre es del otro y ellos no están en el cielo porque todavía están vivos…

El P.P recibe a la nueva fiscal general con algo más que dudas ¿Pero cuándo fue distinto? ¿Recordamos altos cargos de la judicatura que parece que eran absolutamente independientes? O es que quien los nombró los consideraba independientes? La Wikipedia ofrece parte de los currículos de Cardenal, de Divar, de  Fungairiño, Lesmes, Torres-Dulce… Puro orden alfabético y sé que con la poca memoria colectiva que nos  gastamos, pocos/as recordarán a esos próceres y las que pudieron liar. ¿Ha terminado el poder judicial español la Transición que empezó para los demás hace cincuenta años?

El aspirante Núñez no da más de sí. Del ridículo en el Congreso por su facilidad de palabra, al lenguaje en el día contra la violencia contra la mujer: Proteger a la mujer de verdad o proteger de verdad a la mujer. La fórmula se parece pero… ¿estamos en aquello de “la mujer, mujer” de Aznar?  O es que hay dirigentes populares con un  interés tardío por las mujeres. Puede ser, otra vez, el espejo demoscópico.

Acabo como empecé. Ayer, en la librería Gil de la plaza de Pombo se presentó “Palestina, la tierra estrecha” de la periodista Beatriz Lecumberri. La charla, el coloquio, todo iba por el carril de sensatez del que hablaba al principio. Y muy al final, cuando tocaba terminar, en la última petición de palabra un asistente intentó darle la vuelta a todo, respaldando la posición israelí con la misma soberbia y nivel provocador que Netanyahu, negando el genocidio reconocido internacionalmente… Asistía una familia de origen palestino que hasta ese momento no había abierto la boca… Hay quien no quiere entender que la mayoría apreciamos los intervalos grises, y que el blanco, blanco o el negro, negro, solo sirven para cuentos infantiles. En este blog está dicho hasta el aburrimiento: La gente buena está, estamos, con las víctimas. En este caso con las 1.200 asesinadas por Hamás y con las 70.000 asesinadas por Israel. ¿Por qué hay que estar contra las unas si se está a favor de las otras?

 

Gaza, vergüenza de la humanidad; Gaza, siempre en la memoria

 

domingo, 23 de noviembre de 2025

Más allá de Orión

 

 

Ver cosas que no creeríamos. Canciones y películas que nos proponían lo imposible. Puede ser que cada generación haya asistido a lo que poco antes no se podían creer. Ver naves en llamas más allá de Orión es hoy una bonita parábola. Hace “solo” 90 años el mundo iba saliendo de la gran crisis provocada por el crack de la burbuja de 1929 y en España todavía gobernaba la derecha. Hubo una derecha republicana, sí y aplicó la ley con decisión, incluso con bastante crueldad. Pocas bromas. La mayoría de los judíos alemanes todavía no se podían imaginar lo que se les venía encima y en Abisinia, hoy Etiopía, uno de los pocos territorios soberanos de África, los italianos solo eran los vecinos de la costa que ocupaban, Eritrea y Somalia, desde medio siglo antes. Después vino lo que vino en todos esos territorios y en China y… y… y…

El último cuarto de siglo, empezando por aquel 11 de septiembre neoyorquino y siguiendo por la crisis financiera y la pandemia, no estoy seguro de que se pueda comparar a lo señalado en el primer párrafo. Al menos el número de víctimas es  inferior. Pero tampoco nos lo hubiéramos creído en una narración previa. El martes, en Barcelona, he asistido a un partido de fútbol que yo creí un acto de solidaridad con el pueblo palestino y en contra del genocidio perpetrado por Israel. Y en buena parte así fue pero también muchos/as asistimos atónitos/as a un aquelarre indepe.  

Los balcones de Barcelona ya no lucen las decenas de miles de banderas esteladas que se podían observar hace cuatro años o cinco o tres. No. Incluso en la plaza de Sant Jaume, las dos instituciones que se asoman a la misma lucen las banderas oficiales. Sin concesiones. Parecía que se había apagado una buena parte del fuego de 2017. Digamos que ese fuego está perimetrado y no es poco, pero cuando surge la ocasión se reaviva. Lo vimos mientras ascendíamos desde la plaza de España pero sin imaginar          que dentro del Estadi Olimpic tuviéramos que asistir a gritos multitudinarios de “espanyol el que no boti”  o a odiosas comparaciones entre España e Israel, sin atender a lo que los palestinos en general y sus autoridades, aprecian del comportamiento del gobierno español en ese sucio asunto de la masacre en Gaza y Cisjordania.

Y hoy mismo, un primera fila del escapismo, del ilusionismo, como Puigdemont encuentra hueco en un periódico serio para tratar de advertir al socialismo de que su tiempo se ha acabado y no por haber abandonado políticas tradicionales de esa tendencia, no. Debe ser solo por lo suyo, de él. Pese a la amnistía y pese a muchos pesares. También es noticia de esta semana la derrota de los socialistas daneses que  han perdido la alcaldía de Copenhague después de más de un siglo, pero el ex president no muy honorable, fugado, se mueve más entre Bruselas, Suiza y Perpinyà. Más al norte debe darle pereza y hace más frío. En Dinamarca los problemas territoriales son casi desconocidos pero abrazar políticas de la ultraderecha ha sido letal para los socialistas. Y no, no ha sido la ultraderecha la ganadora. La próxima alcaldesa lo será por una alianza de fuerzas progresistas a la izquierda del P.S.

Y aquí, sin tradición de matar pavos en la última semana de noviembre, solo nos vamos a quedar con el timo del viernes negro. En algún espacio de humor han hecho las cuentas: Se suben los precios un 50% y después los rebajan el 30% y a triunfar. Es el modelo del jefe de gabinete de la presidenta de Madrid que, afortunadamente, no es notario y los pavos o quienes hacen el pavo, podrían anidar en alguna sala de algún alto tribunal. O todos los demás. Vamos a echar guindas. Al pavo. Y ya si eso, a la pava.

 

Gaza, vergüenza de la humanidad; Gaza, siempre en la memoria

jueves, 20 de noviembre de 2025

Simbólico y explícito (20N*50)

 


Hace unos días, cuando pensé que la fecha de hoy podía merecer una entrada extra a este blog, no se me había pasado por la cabeza ni que la sentencia fuera tan rápida ni que fuera condenatoria. No quería creer que “el que pueda hacer que haga” ni mucho menos “el fiscal va p’alante” podrían desembocar en donde lo han hecho hoy ¿casualmente? 20 de noviembre de cincuenta años más tarde.

A principios del verano pasado escuché en directo a Baltasar Garzón, en la acera de la calle Tantín, con un pequeño grupo de asistentes al acto organizado por Desmemoriados y la Fiscalía de Derechos Humanos y Memoria Democrática  de Cantabria, le escuché –más o menos textualmente- que de la sala segunda del Tribunal Supremo cabía esperar lo inesperado. Parece que conocía de cerca de qué hablaba.

Mientras preparaba la comida he escuchado a un jurista solvente y probadamente democrático decir que hay que esperar, para una valoración firme, a conocer el conjunto de la sentencia. Yo no soy jurista, tampoco me voy a precipitar. Eso queda para dirigentes neofranquistas. Que haya dos votos particulares cuando desde el inicio del juicio se sabía que dos miembros del tribunal, mujeres ambas, están  adscritas a un perfil progresista mientras los otros cinco cojean de la otra pierna…Es posible que sea tan casual como la fecha elegida.

Escribir hoy hace ineludible esa entrada pero mi compromiso era otro ¿qué hice yo tal día como el de hoy en 1975? Entre los recuerdos directos, una trasnochada más la noche del miércoles, esperando el último “parte” del “equipo médico habitual”, frente al televisor, al lado de mi hermana y esperando a mi cuñado. Salida temprana de casa, sin poner la radio para no despertar a nadie. Mis clases empezaban a las 8. En mi doble calidad de estudiante y trabajador, mi jornada era larga. Empalmaba la facultad con el turno de tarde en la fábrica, con una hora escasa para comer junto a la gasolinera del Paseo de la Zona Franca.

Como empleado de una empresa automovilística había tenido facilidad para adquirir mi propio vehículo. Eso me facilitaba enormemente el triángulo de desplazamientos: Casa-> Zona Universitaria-> Zona Franca-> Casa. El transporte urbano estaba bastante peor que ahora. No debía tener radio en el coche en aquel momento, pero seguramente observé menos tráfico en la calle Aragón y en la Diagonal y la confirmación de la noticia entre los pocos alumnos que estaban en la puerta de la facultad, cerrada a cal y canto. Uno de ellos era de Santander, Ramón, teníamos amigos comunes. Tenía que entregar un trabajo y parecía que ya iba con retraso. No sé cómo consiguió o ya tenía, el teléfono de la profesora. Me ofrecí a acercarlo a donde había quedado con ella. Mientras le esperaba en un bar –no tenía nada mejor que hacer- apareció en la pantalla del televisor el presidente del gobierno en aquella famosa intervención, con la lucecita de El Pardo ya apagada…

Puede ser una fantasía generada posteriormente pero creo que la clientela del bar, cercano al límite entre Barcelona y L’Hospitalet, no aparentaba ninguna tristeza. Tampoco algarabía. Esa llegó en el descanso del turno de tarde y al final de la jornada, en la bodega de la esquina: calle Huelva con Trabajo, muy cerca de donde pocas semanas antes, en un rifirrafe poco conocido y menos explicado, murieron dos agentes de policía por disparos de sus compañeros, de guardia en el cuartel de la calle Guipúzcoa. Y en aquella bodega sí, corrió el cava aunque por primera y única vez en mi vida, yo ya había bebido alcohol antes de la hora del Ángelus.

No he sido capaz de encontrar la publicación –de esta misma cabecera- que denominaba al nuevo Jefe del Estado, hoy emérito, como Juan Carlos el Breve pero creo que la que reproduzco era la que circulaba aquellos días, en mi fábrica y en mi facultad casi como si tuviese depósito legal.

 

Gaza, vergüenza de la humanidad; Gaza, siempre en la memoria