lunes, 17 de junio de 2019

Patrones y marineros


Javier Ceruti entiende de las cosas de la Marina. Es pública su afición. Probablemente se sabe sin titubear los diferentes escalones jerárquicos, que pasan por corbetas, fragatas y navíos combinados con capitanes, tenientes y alféreces. Aquello que en el servicio militar obligatorio del final del franquismo ya se había casi abandonado de las clases teóricas en las demás armas que no vestíamos de blanco. Y en la Armada, como en la vida misma, donde hay un patrón, no manda el marinero. En el Ayuntamiento de Santander, Ciudadanos no ha aplicado el mismo criterio que sirvió para airear la Junta de Andalucía. Bueno.

Ceruti parece que ha sido bastante claro indicando que era más por órdenes de la superioridad que por voluntad propia. Con la lentitud mítica de los caracoles, el PP de la capital de Cantabria va perdiendo apoyos directos y consiguiendo los indirectos suficientes, o casi, para no soltar el bastón de mando. En la próxima ocasión, si se consigue, será después de 44 años. Caso casi único.

El ciudadano Felipe Borbón, jefe de este estado, ha sido condecorado hoy en Londres y en presencia de la reina de allí. Los asesores de imagen han debido hacer algún puente distinto al de la Torre de Londres. Si yo tuviera algo que ver con la casa real no hubiera permitido que le hicieran esa foto que tanto recuerda a alguna botella de ginebra. Además, la reina aparenta proximidad al veganismo, con lo que comer carne es más que pecaminoso.

Estos días largos de luz y cortos de oscuridad tienen en lo personal rituales muy queridos que, cada cuatro años, se pueden ver sobresaltados con temas de pactos municipales y/o autonómicos. Este año seguimos, además, con un gobierno en funciones y el hartazgo popular puede ser mayor que nunca. Lo único que nos falta es que haya que volver a votar antes de final del año. Sandokan puede llegar a ser presidente del gobierno si ocurriera algo así. A estas alturas debe estar ya casi todo analizado, contabilizado, así que me he permitido mirar hacia adentro y pienso hacerlo cada vez más.

Mis dos últimos fines de semana se han desarrollado según lo previsto, rodeado de amigos, recorriendo kilómetros llanos en bici y bordeando picos pirenaicos. Esta semana se conmemora el drama de los aspirantes a refugio. El jueves, en la plaza del  Ayuntamiento, esta ciudad, algunos de sus ciudadanos, seguramente unos pocos, reclamaremos más atención para ese drama que sufre menos del 1% de la población mundial pero que a diario nos asalta con noticias muy dolorosas, que directamente rozan la criminalidad.

Y el viernes inauguraremos verano, que en un clima suave como el nuestro, es una estación muy favorable. Además, ese primer día del verano, desde antes de que yo naciera, era festivo familiar. Cumpleaños fraternal que tenemos la suerte de seguir celebrando…Este año, muy posiblemente, con representación de la familia del otro lado del charco. Nosotros tenemos nuestra otra España que sabe a tabaco, brea y celuloide. Un hermano de mi  padre se afincó en Los Ángeles y su descendencia sigue por allí…




No hay comentarios:

Publicar un comentario