miércoles, 24 de agosto de 2011

El ojo y el dedo


Entrada publicada hoy en http://www.aquiconfidencial.es/

No me importa confesar que he retrasado unas horas la aparición de esta columna por culpa de Gadafi. Tenía yo ganas de escribirla en el post-gadafismo y parece que esa etapa en la historia de Libia empieza hoy. Un nuevo día de San Bartolomé que espero no tenga un baño de sangre como el famoso de Paris de 1572. Y no sobran ciertas precauciones. El lunes todavía apareció el hijo más  fantasma del dictador más fantasma y durante unas horas la propaganda parece que ganó a la realidad.
Hace ya setenta años, en los mismos escenarios, también la guerra se acompañó de propaganda. Parece que Rommel consiguió despistar al servicio secreto de Su Majestad, en su desembarco en Trípoli, haciendo pasar varias veces las mismas unidades por el mismo lugar de la ciudad. Parecían muchos más.
Supongamos que pese a su desaparición momentánea el dictador libio ha llegado a su final. Debería prepararse Siria para sacudirse definitivamente a su dictador con ayuda internacional ¿Va a ir en serio este nuevo modelo de relaciones internacionales?
Es cierto también que el titular tiene que ver con causas en principio menores, deportivas, pero que se empiezan a vivir con inquietud en sectores sociales en principio no muy cercanos al deporte. Hace muchos años tuve un compañero de trabajo que te metía el dedo en el ojo, en broma, sin hacer daño, aunque a veces… mientras te preguntaba ¿molesto? Es lo que parece que no ha hecho Mourinho con el segundo de a bordo de Guardiola. Preguntar. La cámara estaba allí y si “in fraganti” tiene significado a partir de ahora se puede poner de ejemplo a Mou, para los amigos entre los que no me cuento. Ahora no me extrañaría que la justicia deportiva reparta sanciones igualitarias. Lo mismo por agredir que por responder a la agresión. El valor cronológico en esto es básico. También está aquello de mirar el dedo en vez de la luna, lo cual probablemente también nos acerca a Mourinho.
Grandes madridistas de toda la vida se van rasgando las vestiduras al ver a su equipo en manos tan equívocas y ni Rubalcaba ni Rajoy parece que se hayan dado por enterados pese a sus inclinaciones comunes en el tema futbolístico. Ahí se queda la comunidad de nuestros R. En el tema de la reforma constitucional alguien de dentro le ha jugado una mala pasada al candidato socialista y le ha dado las cuarenta con el as a Rajoy. Una especie de dedo, de Rajoy, en el ojo, de Rubalcaba. Y no consta que Mariano haya preguntado si molesta.
Yo, antes de emprender un viaje a un lugar cercano que espero sea muy corto, ya he ciberfirmado pidiendo referéndum para la reforma constitucional. Una nueva exigencia de ¿Merkel? ¿Los mercados? que no sirve para gran cosa y que priva de un instrumento básico en época de crisis. En algún momento habrá  que reactivar la economía y el empleo aunque sea aumentando deuda y déficit y no parece prudente que esa decisión política coyuntural pueda ser detenida por el Tribunal Constitucional.
A la vuelta de ese viaje Diego ya llevará 100 días sin gobernar Cantabria cuando podía hacerlo y será momento de analizar todo lo que no ha hecho.

miércoles, 17 de agosto de 2011

Pasando el Ecuador


Entrada publicada ayer en http://www.aquiconfidencial.es/

Cerca de mi la funesta manía de contar. Lo de pensar ya es diferente. Veo que a lo largo de esta semana, con inicio festivo, vamos a estar equidistantes de las pasadas elecciones locales y de las próximas legislativas. Eso era lo que en algunos momentos folklóricos, a bordo de buques con pasaje de, al menos, tres categorías, o entre sectores de estudiantes universitarios en tiempos no muy lejanos, se llamaba el paso del Ecuador. Estar en el medio.
No me hubiese gustado nada haber estado entre Merkel y Sarkozy esta tarde en su menaje a dos, -el corrector se pelea conmigo por intentar ponerlo en parte en francés- y yo ya estoy muy cansado. Con j, pues con j. Así es como nos tienen a todos los demás, con muchísima j. Y no es por el tema ideológico. Tiene que ser por la peluquería.
Trato de explicarme. Mucho más radical en el asunto ideológico era Margaret Thatcher – En Londres la herencia  está más a la vista que nunca-  pero aquel estilismo que a cualquiera podía recordarle el de alguna mujer de la familia, el mohín de la alcurnia, su dicción perfecta que hacía que los intermediate, quizá upper beginner, entendieran lo que decía, o todo ello junto, hicieron de la dama blindada un mito generacional que no pudo sucumbir a la crítica fácil.
Merkel es otra cosa. Lo de la peluquería está a la vista y de su acento alemán, fino o vulgar, no puedo opinar. Abandoné demasiado pronto el estudio de esa lengua. Que debe ser lo que le pasa a la mayoría de los vagos del Mediterráneo. Lo que va ocurriendo día a día es que se nota que ni ella ni su equipo quieren figurar en el libro de oro de los mitos europeos. Y arrastra tras ella al pequeño Nicolás en operaciones que no se pueden entender.
Si ese hombre disfruta con Carla, como parece, tiene que sufrir mucho, mucho, con Ángela. Menos mal que es bajito, pues la cabellera no le falta. Y se han montado el susodicho menaje, con j para no molestar a mi corrector, y habrá que modificar los tratados de la Unión para institucionalizar la conferencia a dos, el menaje con j, entre la canciller y monsieur le Président. Y los demás, los otros 25, o alguno menos si sólo hablamos de la moneda, a mirar y a asentir.
Llevo tiempo pensando que para esta Europa no hacían falta tantas alforjas, no estoy lejos de sentirme timado. Hoy los del menaje con j han “descubierto” que hace falta más gobernanza común, económica y financiera, por supuesto. Como la crisis les de tiempo quizá descubran que hace falta más política común, de todo. Si no son tontos de baba ni están totalmente vendidos a los piratas modernos –mercados, agencias de descalificación, etc.- ¿dónde habrá que buscar?
Las tasas de crecimiento, de estancamiento, de sus dos grandes países en el segundo trimestre del año, conocidas hoy, o las pérdidas de sus inversores en  bolsa en lo que va de año no difieren sustancialmente de, por ejemplo, las nuestras. La arrogancia sumada a la estupidez da una mezcla explosiva.
Y quizá por ahí, por la mezcla, me viene a la memoria Ana Mato. No se si todavía usa un Jaguar que le llegó de regalo a su sociedad de gananciales, de alguien relacionado con la trama Gürtel, pero sólo por haberlo usado debería ser más comedida. También es cierto que quedarse de guardia en la calle Génova, con el cristo, con perdón, de tráfico que parece que hay este agosto en el centro de Madrid por causas metafísicas, estar de guardia mientra el jefe se forra a pulpo con diez grados menos de temperatura, eso es para enfadar a cualquiera. Pero arremeter contra Rubalcaba en el tema de las Diputaciones Provinciales ¿razonando? que lo dice ahora para fastidiar al PP, describe muy bien la altura, física y política, de la guardiana del pulpo. ¿Será mejor ahorrar en Sanidad y Educación que en Diputaciones Provinciales?

lunes, 8 de agosto de 2011

Miedo a B. Brecht

Entrada publicada ayer en Aquiconfidencial.es
Este verano, que no es tan caluroso como nos habían pronosticado, que no está a la altura de la primavera caliente que ya sufrimos o disfrutamos, es el escenario de miedos diversos. No hace falta irse a los escenarios tradicionales del miedo, de Afganistán al cuerno de África, pasando por Kosovo. No es sólo el miedo que ya atravesó a irlandeses, islandeses, griegos o portugueses, ni el nuestro, sabiamente mantenido por quienes tenían la solución aunque no nos la contaban. Ese equipo, de Mariano abajo, todos sin exclusión, va a destronar a los mejores profesionales de la cara pintada. Tonettis aficionados!
El miedo ya ha llegado a Milán, el feudo del caballero amigo, por el que tanto hicimos y tanto ha hecho por nosotros, entre otras, mediatizarnos la inmensa mayoría de la información que nos llega. Bueno, pues Italia, con una deuda pública que dobla la española en términos de PIB, ya nos ha alcanzado en el penoso asunto del diferencial con los bonos alemanes. La famosa “prima” que en los últimos meses se ha apoderado de los titulares de las primeras páginas.
España, Italia … Economías potentes hasta hace nada pero bien alejadas de la superpotencia del último siglo. Pero es que ahora ya es la propia superpotencia la que tiembla. Los títulos de su deuda, inmensa deuda colocada fundamentalmente en Asia, han perdido por primera vez la calificación óptima. La triple A, que a tantos nos recuerda asuntos mucho más siniestros, se queda reducida a la deuda de algunos países europeos y Canadá. A saber durante cuánto tiempo.
Y este lunes veremos lo que el miedo nos depara.  A las nueve de la mañana o a las tres de la tarde, las nueve en Wall Street. Miedo me da saber que está pasando en Tokio donde ya debe ser madrugada. También puede ocurrir que algunos políticos mediocres, con más poder que responsabilidad, empiecen a considerar la posibilidad de hacer paréntesis en sus vacaciones. Al fin y al cabo, no hace tanto calor.
Tanto Merkel, por nacimiento, como Sarkozy, por ancestros, no deberían olvidar los versos de Bertold Brecht. En versión libre, vinieron a por los griegos, pero yo no era griego. Vinieron a por los portugueses, pero yo no era portugués … Cuando vinieron a por los alemanes, o los franceses, la mierda ya cubría el planeta.

lunes, 1 de agosto de 2011

Tres por cuatro = 20 N


Entrada publicada hoy en http://www.aquiconfidencial.es/

Debe ser lo que en fórmula anticuada, cursi y lo que quieran añadir es “el inexorable paso del tiempo”, jo, inexorable. Cómo para preguntar por ese significado al ciudadano común a pie de caseta de feria. Está muy próximo a inoxidable, de tal manera que no hay que excluir que en algún programa televisivo, ciudadanos y ciudadanas muy bien pagaos y pagás, lo confundan. La última noche de julio todo un premio Nóbel me sorprendía desde una emisora de radio, con lo que serán sin duda modismos americanos de nuestra lengua, pero que a mi me sonaban bastante mal. Como estaba conduciendo y sin  diccionario a mano, y mi memoria ya no alcanza para consultarlo, pongamos ahora, pues me quedo en la duda de si se puede ser premio Nóbel y además patear el diccionario.
El paso del tiempo, inexorable, que me procura una sensación de celeridad que no concede pausas. Se acaba la legislatura y parece que acaba de empezar, no ésta, la anterior. A la operación de cargarse una relativa estabilidad política y de crecimiento económico: 2004-2008 sucedió la de triturar una mayor estabilidad política en época de crisis hasta conseguir, finalmente, un adelanto electoral de unos pocos meses. Nuestro tea party nacional se ha ido de vacaciones contento, ¿o no?
A pesar de la ventaja inicial prevista en la contienda, se describe como un demonio al candidato socialista, encarnación de todos los males físicos y metafísicos. Tres puntos de intención de voto le ha desquitado en unos días al otro aspirante, ganador de un Tour en la modalidad pedal off, a ese ritmo, tenemos un empate virtual en la víspera electoral. Si además presenciamos unos debates como en una democracia seria, en este momento estoy bastante seguro de que eso no va a ocurrir, y empeño mi contrastada capacidad de profecía para ello, bueno, si hubiera o hubiese esos encuentros ante los electores…, uh, uh, qué miedo.
El de Solares es capaz de hablar horas sin consultar un papel y el otro no entiende ni su propia letra en la “chuleta” preparada para una entrevista con un amigo. No hay color. Tres puntos cada mes y en noviembre todos iguales. Sin esperar que estallen más asuntos como el de la caja de Alicante, segunda provincia española con más afiliados al todavía partido mayoritario de la oposición. Lo de la CAM ha tenido una virtud. Uno de los más dicharacheros portavoces del PP, el de la chupadita de la semana anterior, ha enmudecido. A saber cuándo vuelve y con qué. Ahora altos mandos y mandas del PP han conseguido el famoso guirigay con las fechas de las elecciones andaluzas…
Y una cosa que no puede esperar es la denuncia de la poca estima que le tienen a nuestro nuevo presidente regional los suyos propios. Todo el protagonismo por lo de la devolución de competencias para el presidente murciano y la presidenta madrileña. No me importa si soy el primero o el único, pero Diego lo había dicho primero. No sigo por respeto a los cien días. Pero la hemeroteca canta y es justo reivindicar las patentes de cada uno.
Pase lo que pase dentro de esos ciento y pico días que nos separan del 20N, esa fecha ya va a tener más significados que los que tenía hasta ahora -que no eran mancos. Me alegro por marzo, que es un mes muy querido en esta casa y ya nos ha dado bastantes  disgustos electorales. El primero en 1986, que quede claro.